Desde noviembre de 2022, tras el cierre del tiradero municipal y metropolitano que operó en la Villa de Zaachila, a junio de 2024, el ayuntamiento de Oaxaca de Juárez ha gastado de manera extraordinaria al menos 417 millones de pesos por la crisis de la basura, una suma que rebasa en poco la deuda heredada por las anteriores administraciones (calculada en 405 millones).
El desembolso ha sido principalmente para el pago de los traslados y los depósitos de los desechos en rellenos sanitarios de los estados de Puebla y Veracruz. Una parte más ha sido para la adquisición de maquinaria para el tratamiento de los residuos en la ciudad, tanto compactadoras como camionetas para recolección, una trituradora, entre otros insumos y herramientas, según ha señalado la autoridad que preside Francisco Martínez Neri.
De los 417 millones, 47 se gastaron entre agosto y diciembre de 2022; 250 millones fueron usados en 2023, mientras que en lo que va del 2024 son 120 millones los que se han pagado por los traslados y depósitos en basureros certificados en Puebla y Veracruz. El edil ha reiterado que el costo mensual de los traslados y depósitos sigue siendo de 20 millones de pesos, cifra que prácticamente no se ha reducido pese a algunas medidas para el aprovechamiento de los desechos, como la compactación para su termo destrucción en la planta cementera de la Cruz Azul o la trituración para incrementar el volumen de lo que se hace composta.
Te puede interesar: Con operativos, al menos 200 ambulantes retirados
A decir del edil, los montos no han podido reducirse porque algunas personas de otros municipios siguen trayendo o abandonando sus desechos en la capital. También reconoció que el volumen de desechos aumenta en cada temporada turística, cuando se estima en 49 toneladas extras diariamente. “Tenemos que redoblar esfuerzos, efectivamente, se multiplica la basura y tenemos que recogerla, no podemos dejarla ahí, cueste lo que cueste, nuestra gente está trabajando en eso”, apuntó.
Sobre el proyecto estatal del Centro Integral de Revalorización de Residuos Sólidos Urbanos (CIRSSU), Martínez Neri dijo que en una última plática con el gobierno estatal ya se vislumbra la posibilidad próxima para depositar ahí los desechos. Sin embargo, aún no hay fecha concreta.
Fue el 6 de julio de 2023, hace un año, cuando el concejal emanado de Morena rindió un informe a la ciudadanía respecto del manejo de los desechos. Entonces, en la Plaza de la Danza, explicó a la población y autoridades invitadas, así como especialistas, que de agosto de 2022 a junio de 2023 se habían empleado 152 millones 510 mil 279.15 pesos, pagados en su mayoría con ingresos de las contribuciones municipales. Además de que el 90.13 por ciento de los recursos (alrededor de 137 millones) habían sido para el traslado y confinamiento de los residuos. El resto (poco más de 15 millones) para adquisición de maquinaria, materiales y otros insumos.
Al basurero clausurado por colonos de Zaachila el 8 de octubre de 2022 también eran llevados los desechos de otros más de 20 municipios metropolitanos, aunque el que más dependía de él era la ciudad de Oaxaca.