En los últimos 10 años el comercio informal ha ganado terreno en el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca. En 2010, el número de ambulantes se estimaba en 800, y durante los primeros meses de la actual administración se han llegado a contabilizar hasta 3 mil 300 puestos en la vía pública.
Comerciantes establecidos y locatarios de los mercados públicos, explicaron que el aumento se ha llevado a cabo de manera paulatina desde la primera gestión que encabezó José Antonio Hernández Fraguas.
“En la primera administración de Fraguas habían 800 puestos, así lo recibió Luis Ugartechea Begué, pero al concluir el mandato del panista ya eran mil 500, cuando se fue Javier Villacaña según habían mil 200, pero la verdadera invasión ocurrió en los últimos meses del segundo gobierno que encabezó Fraguas y en los primeros 100 días de Oswaldo García Jarquín”, señaló Maximiliano Néstor Ortiz Jiménez, presidente de la organización Benito Juárez, Artesanos, Locatarios y Comerciantes de Oaxaca.
En los datos que solicitaron los locatarios a la autoridad municipal, se reportó 3 mil 300 ambulantes. “Pero son más, en esta temporada de Semana Santa se multiplican los puestos”, detalló el ciudadano.
Expuso que el número de puestos podían alcanzar ya los 4 mil en el Centro Histórico, “una cantidad totalmente exagerada y fuera de control, lo más alarmante es que se sigue expandiendo en la principales calles del centro”.
Las pérdidas económicas ocasionadas por el comercio informal “son incuantificables porque ya no solamente afecta al que vende artesanías, sino a los restauranteros y las juguerías que se encuentran al interior de los mercados, cuando es temporada de calor en los puestos se venden jugos y cuando es diciembre se venden adornos para la navidad, ellos pueden cambiar de giro cuando les conviene y nosotros no lo podemos hacer”.
Ortiz Jiménez detalló que otra de las preocupaciones de los comerciantes establecidos y de los mismos ciudadanos, es la falta de cajones de estacionamiento en el primer cuadro de la ciudad.
“Todas las calles, incluso alrededor de los mercados ya está invadido, cuando alguien se estaciona en algún lugar donde se colocan los puestos, es agredido y multado por los ambulantes, ellos tienen convenios con la autoridad y los ciudadanos están desprotegidos”.
La falta de cajones obedece a varias situaciones, ya que los ambulantes ahora utilizan camiones como bodegas movibles que se estacionan en el Centro Histórico. “Están colocando bodegas rodantes, traen camiones donde guardan y descargan sus mercancías, sus carros se estacionan en doble fila o también ocupan varios cajones sin que nadie los moleste”, refirió el comerciante.
Por su parte, la dirigente de la organización Renacimiento A.C., Carmela Luján, explicó que sus agremiados han respetado los espacios que se ganaron en las administraciones pasadas en el primer cuadro.
“En la calle de Flores Magón nos quitamos porque fue un acuerdo de palabra con la pasada administración, nos reubicaron en las calles aledañas pero cuando entró la actual administración no se acercaron para continuar con esta reubicación, por eso los compañeros se regresaron a sus lugares.
Aunque el aumento de nuevos puestos en la vía pública es visible en todas las calles, mencionó que no se han colocado nuevos puestos y que de haber un nuevo censo o programa de reordenamiento, “lo apoyaremos siempre y cuando nos tomen en cuenta”, comentó.
