Distribuido en tres zonas, la primera con todo tipo de abarrotes, ropa, zapatos y accesorios; la segunda donde se ubican las carnicerías, fruterías, pollerías, queserías, y la tercera donde se puede encontrar el área de comida, el Mercado Sánchez Pascuas reclama de atención a sus necesidades.
Con 220 puestos fijos y 40 semifijos, el mercado también identificado en su momento como del Carmen Alto, cumple 46 años y requiere de constante mantenimiento en sus instalaciones eléctricas como hidráulicas, garantizar la seguridad en su interior como en el exterior para que más oaxaqueños acudan a realizar sus compras.
Marcos Calvo Gómez, secretario General de la Unión General de Expendedores del mercado, recordó que desde 1972 se encuentran en este inmueble que ha tenido diferentes remodelaciones para que responda a las demandas de los locatarios y comerciantes.
Si bien, sufren del abasto de agua para atender las diferentes áreas, la construcción de una cisterna los ayuda a sortear el suministro, además de pedir que las autoridades municipales atiendan sus planteamientos.
Recordó que el Mercado Sánchez Pascuas tenía otro nombre. El mercado nació con el nombre de “El Carmen”, debido a que estaba a un costado del templo del Carmen Alto en 1962.
El mercado inició con un número de 160 locatarios y el 19 de septiembre de 1972 marcó la historia de este sitio, ya que estrenó nueva ubicación y su nombre cambió, en honor a quien realizó el alcantarillado del primer cuadro de la ciudad: el arquitecto Sánchez Pascuas.
En tanto, dona Mary López afirmó que es necesario reanimar la presencia de consumidores en el mercado debido a que enfrentan la competencia de supermercados y grandes cadenas comerciales.
“Nosotros lo que buscamos es que no se pierda la tradición de que acudan las familias a los mercados, y por eso se necesita que atiendan de manera constante sus necesidades, para que no se deteriore y siempre se encuentre en buenas condiciones”.
A pesar de que ofrecen productos de calidad a buen precio, mucha gente prefiere adquirir sus productos en esos comercios que obligan a promover la visita a los mercados para que no decaigan sus ventas.
Aunado a ello, se necesita atender las instalaciones eléctricas y de gas, sobre todo para prevenir cualquier tipo de siniestros que pudieran presentarse, así como pintar fachadas y un constante mantenimiento en sus diversas áreas.
El mercado cuenta con una entrada de la calle de Porfirio Díaz, en cuya explanada se encuentras vendedores de flores, además de tener una más en Tinoco y Palacios.
