El jardín Cassiano Conzatti se ha convertido en la sala de espera de las y los oaxaqueños que acuden ansiosos en busca de una prueba de SARS-CoV-2 que se aplican en la Unidad de Medicina Familiar Número 1 del IMSS y que ayer comenzó su tercera semana consecutiva agobiando a su personal con la demanda de más de 150 personas. El emblemático parque, dedicado al afamado naturalista y botánico nacido en Italia y radicado en Oaxaca a finales del siglo antepasado, dejó de ser lugar de paseo para intentar cobijar con su sombra a potenciales enfermos de Covid-19.
De acuerdo a fuentes cercanas al nosocomio, por la mañana se aplicaron 75 test para detectar Covid en la UMF 1, de los cuales más de 40 personas dieron positivo, con lo cual alrededor de 57% de los casos arrojaron portar el virus.
Son las 8:00 horas de una fría mañana y, poco a poco, se va formando una fila sobre la calle Jacobo Dale Vuelta, en el acceso a la unidad del IMSS, al tiempo que se integra una segunda fila; la primera, para quienes acuden a consulta o por algún servicio, la segunda, de personas con síntomas de gripe, tos, flujo nasal, malestar muscular, temperatura, indicios de Covid.
La dispersión de la variante Ómicron del SARS-CoV-2, junto con la relajación de medidas sanitarias, las señales contradictorias de las autoridades federales y estatales, la desatención a la salud, aglomeraciones y alta movilidad conformaron el coctel ideal de lo que los especialistas han llamado la “tormenta perfecta” que han llevado al Covid a niveles récord durante la última semana y que ha contagiado a los oaxaqueños.
Ayer ya se trabajaba con tres turnos en esa unidad del centro de la ciudad. Las mismas filas y larga espera se podía observar también en la Unidad de Medicina Familia Número 38 del IMSS ubicada sobre avenida Madero, en la zona del Ex Marquesado. De acuerdo a fuentes consultadas por EL IMPACIAL, El Mejor Diario de Oaxaca, hasta la tarde de ayer se había atendido a poco más de 110 pacientes. En el turno vespertino se aplicaron 75 pruebas Covid-10 con alrededor de 40 positivos. Familias enteras recibieron la noticia de que sus integrantes estaban infectados de Covid; aunque, al parecer, con menor gravedad que hace algunos meses.
En busca de sombra, ante el malestar de cuerpo y en busca de una “sana distancia” llevó a los pacientes y familias a distribuirse y extenderse al Jardín Conzzatti. Un nutrido grupo de personas, pacientes en busca de atención. Y había desde adultos mayores hasta hombres y mujeres en edad productiva, jóvenes, adolescentes e, incluso menores de edad, alrededor de 5 años, que iban en busca de la certeza en torno a su salud. Muchos dieron positivo al virus.
Por la noche, en un recorrido fue posible observar que se mantenía una larga fila, al menos 50 personas serían atendidas por 4 médicos que fueron habilitados para brindar pruebas al finalizar el día. Ya los pacientes acudían bien abrigados dado que, desde las 19:00 horas, comenzó a apretar el frío y a soplar ligeramente el viento.
