A la espera de un sitio donde el gobierno estatal concrete el Centro Integral de Revalorización de Residuos Sólidos Urbanos (CIRRSU), el municipio de Oaxaca de Juárez mantiene soluciones temporales ante la crisis de la basura. Aunque también busca un sitio de disposición final propio, los envíos de una parte de desechos orgánicos han costado ya más de 100 millones de pesos, explica el presidente municipal, Francisco Martínez Neri.
El concejal no descarta que esta solución obligue a solicitar un préstamo o buscar otras fuentes a finales de año, entre octubre y diciembre. Pero por ahora asegura que las “finanzas sanas” han ayudado a costear los traslados mediante góndolas a depósitos en Veracruz.
En tanto se consolida el CIRRSU, el municipio recurre a otras soluciones parciales como la reducción en la generación de residuos y la compra de maquinaria para trabajar con lo orgánico y un mayor volumen de inorgánicos que puedan aprovecharse en la planta cementera Cruz Azul.
Martínez Neri señala que tras la aprobación para la compra de una compactadora y una trituradora (ambas por un costo global de casi 6 millones de pesos), se pretende reducir el volumen de inorgánicos que terminan en Veracruz. Esto al tener una mayor capacidad de compactación de desechos para enviar a la planta cementera y de tratamiento de orgánicos para campos agrícolas.
Como esto, el edil explica que se trabaja en la implementación del programa “Basura Cero”, a fin de reducir la generación de desechos en todo el municipio. Al 2020, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) calculaba que en la capital se recolectaban diariamente 476 toneladas de desechos. Pero a raíz de la crisis, y según las estimaciones del ayuntamiento, la cifra ha bajado a las 300 toneladas.
Pero nosotros no le estamos apostando a tener solamente un sitio de disposición final sino que a través de Basura Cero nos proponemos que se baje la generación de residuos al máximo, al grado de que de un 100 por ciento lo bajemos a un 20 por ciento”, ha señalado Elsa Ortiz Rodríguez, secretaria de Medio Ambiente y Cambio Climático del ayuntamiento.
La funcionaria ahonda que esto permitirá un manejo “más efectivo” de los desechos y con menor impacto ambiental.
