La constante búsqueda de espacios automáticos en la UABJO generó ayer un enfrentamiento con el saldo de un herido por arma de fuego en la Facultad de Medicina y Cirugía, donde un grupo de porros intentó apoderarse del inmueble ante la resistencia de trabajadores.
La confrontación que se realizó entre personal de la Facultad y los manifestantes a las 6:30 de la mañana, ocasionó que el bibliotecario Alfonso Ortiz, conocido como el “Krosty” fuera agredido con un balazo en la pierna y trasladado al Hospital Civil.
El rector de la UABJO, Eduardo Bautista Martinez, condenó este hecho y demandó la pronta investigación para sancionar a los responsables, para saber si son del mismo grupo que el lunes cerró Ciudad Universitaria.
Por esta situación, la Fiscalía General de Oaxaca inició una carpeta de investigación por los hechos ocurridos, en colaboración con las autoridades de la Facultad de Medicina.
Rubén Vasconcelos Méndez, titular de la Fiscalía, afirmó que las clases tuvieron que ser suspendidas por las diligencias que inició el personal de la dependencia en el interior de la Facultad, donde se encontraron casquillos percutidos.
“Vamos a realizar la investigación en los términos que nos marca la ley y esperamos dar con los responsables. Con la Universidad tenemos una colaboración estrecha porque creemos que en los espacios educativos se debe tener tranquilidad y calma”, expuso.
El fiscal confió en la denuncia de la persona lesionada, luego de que las autoridades universitarias acudieran ante el Ministerio Público por los hechos que generaron la suspensión de las clases que serán reanudadas este día.
Sobre la venta de espacios en la Universidad, el funcionario expuso que se cuenta también con varias carpetas de investigación donde se aplicará la ley como corresponda.
De la situación en la agencia municipal Vicente Guerrero, de la Villa de Zaachila, autoridades de la Fiscalía aclararon que las personas que habían sido detenidas el sábado por portación de armas de fuego fueron liberadas horas después porque no es considerado un delito grave.
“No se les liberó por presión en ningún momento. Simplemente estamos aplicando la ley y la normatividad en la materia; la ley dice que en algún delito que no amerite prisión preventiva, las personas tienen derecho a su inmediata libertad y eso es lo que hace la Fiscalía”, explicó.
