La operación fue supervisada por el exvicepresidente de la junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes de la ONU, Hao Wei.
De acuerdo con el South China Morning Post, un medio originario de Hong Kong, se prevé que el implante ayude a desvanecer los impulsos del paciente por beber alcohol durante cinco meses.
Liu es alcohólico desde al menos 15 años. Consume aproximadamente medio litro de licor diariamente.
Liu declaró a la prensa tener esperanza de “disfrutar una vida libre de alcohol” debido a que este “ha destruido sus relaciones personales”.