El Chocolate del Bienestar ya es una realidad en México. Este 10 de julio de 2025, la presidenta Claudia Sheinbaum presentó oficialmente este nuevo producto durante su conferencia mañanera, generando gran interés por su sabor natural, origen campesino y bajo precio.
Si eres fan del chocolate o simplemente buscas consumir productos más justos y saludables, aquí te contamos todo lo que debes saber sobre esta nueva golosina mexicana.
¿QUÉ ES EL CHOCOLATE DEL BIENESTAR?
El Chocolate del Bienestar es un producto 100% mexicano, elaborado con cacao cultivado por campesinos de Tabasco y Chiapas, principalmente beneficiarios del programa Sembrando Vida. Su objetivo es claro: ofrecer un dulce rico, accesible y que genere impacto social positivo al apoyar directamente a comunidades indígenas y rurales.
Este chocolate no contiene conservadores, saborizantes artificiales ni edulcorantes, lo que lo convierte en una alternativa más saludable frente a las opciones comerciales.
¿DÓNDE SE VENDE EL CHOCOLATE DEL BIENESTAR?
Actualmente, solo puedes encontrarlo en las Tiendas del Bienestar, espacios creados por el gobierno federal para distribuir productos básicos y de origen social a precios justos. La distribución del chocolate se hará por etapas, por lo que es posible que aún no esté disponible en todas las sucursales.
¿CUÁNTO CUESTA EL CHOCOLATE DEL BIENESTAR Y QUÉ PRESENTACIONES HAY?
El chocolate llega al mercado en tres presentaciones con precios pensados para todos los bolsillos:
- Barra de chocolate: $14 pesos
- 50% cacao, 40% pasta de cacao, 10% manteca, 35% azúcar de caña natural.
- Chocolate en polvo: $38 pesos
- Ideal para preparar bebidas rápidas o repostería.
- Chocolate de mesa: $96 pesos
- Perfecto para quienes aman el clásico chocolate caliente mexicano.
Todos los productos incluyen vainilla natural, un poco de lecitina de soya y una mínima cantidad de sal, lo que ayuda a realzar el sabor sin afectar la calidad nutricional.
¿QUIÉN PRODUCE EL CHOCOLATE DEL BIENESTAR?
Por ahora, este chocolate se maquila en fábricas externas, aunque el gobierno busca a futuro establecer plantas propias para consolidar su producción y aumentar su impacto social.
Este nuevo producto no solo es una opción deliciosa, sino también una forma de apoyar directamente a los productores rurales del país. Su bajo costo, su composición natural y su distribución en espacios públicos lo convierten en una golosina con propósito.