El carbón activado para la piel se ha convertido en el ingrediente estrella de mascarillas, jabones, exfoliantes y otros productos de skincare gracias a su increíble capacidad de limpiar a profundidad, absorber toxinas y dejar un cutis fresco y radiante.
¿Qué es el carbón activado?
El carbón activado es un polvo negro ultrafino que se obtiene de calentar carbón vegetal a temperaturas extremadamente altas. Este proceso le otorga una estructura porosa única que lo convierte en un gran aliado, para eliminar toxinas, impurezas y exceso de grasa.
En el mundo del cuidado de la piel, se ha vuelto un básico por su poder de absorción. Funciona como una esponja microscópica que atrapa bacterias, residuos de maquillaje, suciedad y contaminantes del ambiente, dejando un cutis mucho más limpio y purificado. Además, su versatilidad permite que lo encuentres en múltiples formatos, desde pastas dentales, mascarillas, shampoos, agua micelar, toallitas desmaquillantes, entre otros.
Beneficios del carbón activado para la piel
Si eres fan del skincare seguro lo has visto en todos lados, pero ¿sabes por qué es tan beneficioso para la piel?
Aquí te damos las razones:
Elimina impurezas y toxinas: Gracias a su capacidad de absorción, el carbón activado elimina los residuos que se acumulan en la piel debido al maquillaje, la contaminación y el sudor. Es perfecto para hacer una limpieza profunda y conseguir un cutis fresco.
Controla el exceso de grasa: Si tienes piel grasa o mixta, es tu mejor aliado. Ayuda a equilibrar la producción de sebo sin resecar la piel en exceso, dejando un acabado mate y saludable.
Desobstruye poros: Con el tiempo, los poros pueden llenarse de suciedad, lo que provoca puntos negros y espinillas. Este ingrediente penetra en los poros y elimina las impurezas que los bloquean, mejorando su apariencia.
Exfolia suavemente: A pesar de ser un polvo ultrafino, tiene una ligera acción exfoliante que remueve células muertas sin ser agresivo, dejando la piel renovada y lista para absorber mejor los productos de tu rutina.
Aclara el tono de la piel: Su capacidad para eliminar residuos y células muertas ayuda a que la piel recupere su brillo natural y un tono más uniforme, reduciendo la apariencia de manchas y opacidad.
Ayuda a combatir el acné: Su efecto antibacteriano y purificante ayuda a calmar inflamaciones y reducir la aparición de granitos.