La primavera comienza este domingo y deben ser muy pocos los que no estén contando los días para recibirla, pero… ¿Te has preguntado por qué cambia el clima en el mismo momento todos los años? ¿Qué son las llamadas estaciones del año? Una estación, es un período del año que se distingue por condiciones climáticas determinadas. Cada una tiene su propia luz, temperatura y patrones climáticos que se repiten año a año.
Las cuatro estaciones son primavera, verano, otoño e invierno, siguen regularmente una a continuación de la otra y nunca cambian. En las dos primeras, primavera y verano, los días duran más que las noches, mientras que en las otras dos, otoño e invierno, las noches son más largas que los días.
Los meses que ocupan van a depender del lugar (latitud) del planeta en el que te encuentres. Según la latitud y la altura, los cambios meteorológicos a lo largo del año pueden ser mínimos, como en las zonas tropicales bajas, o máximos, como en las zonas de latitudes medias.
Historia de la primavera
La primavera era para los griegos la celebración del retorno de Perséfone con Deméter.
Perséfone, cuenta la tradición, era hija de Deméter, una diosa agrícola y de la tierra, y al ser llevada por la fuerza bajo tierra al mundo de los muertos, se entristeció tanto y fue tan infeliz, que a Hades no le quedó más remedio que llegar a un arreglo: ella pasaría seis meses con él bajo tierra (correspondientes al otoño e invierno) y luego seis meses de vuelta con su madre (primavera y verano). Así, la época primaveral era para los griegos la celebración del retorno de la hija con Deméter, quien de pura alegría hacía florecer las plantas.
¿Por qué se producen las estaciones del año?
Las estaciones se deben, a la inclinación del eje terrestre. La Tierra está inclinada sobre su eje en relación con la órbita que recorre alrededor del sol. Por lo tanto, las estaciones no se producen al mismo tiempo en el hemisferio norte (Boreal), que en el hemisferio sur (Austral), sino que están invertidos el uno con relación al otro.
La primavera llega al hemisferio norte
La primavera se caracteriza por un ascenso gradual de la temperatura, dispersión de las lluvias, días más largos y soleados, y floración y reverdecimiento de las plantas de hoja caducifolia (que cae).
La primavera inicia, astronómicamente, con el equinoccio de primavera (el 20 de marzo) y culmina con el solsticio de verano (el 21 de junio).
El primer día de primavera es llamado equinoccio Vernal (equinoccio significa misma cantidad de días en latín). Este 2018 la temporada tendrá una permanencia de 92 días y 18 horas, por lo que concluirá el próximo 21 de junio con el comienzo del verano. Su nombre se procede de los términos “Prima” que quiere decir primero y “Vera”, que significa verdor. Las primeras flores que aparecen, lirios, tulipanes, iris y lilas. El primer día de esta época, amanecer y atardecer, ocurren con 12 horas de diferencia. En la mitad del planeta no existe esta temporada, pues sólo se presenta en las zonas templadas del planeta.
