Esta semana en las audiciones de La Voz México, Cindy Coleoni cautivó con su voz a Natalia Jiménez, Carlos Rivera y Anitta, jueces del reality show. Maluma, quien dio la vuelta a su silla hasta el final de la presentación de la cantante argentina, aprovechó para hablar bien de su físico, aunque el programa de TV supuestamente es para destacar el talento musical de los participantes.
“¿Sabes qué? Me arrepiento de no haberme volteado”, le dijo el colombiano a Coleoni, quien interpretó un cover de “Don’t Speak”, de No Doubt, guitarra en mano. “¿Te puedo decir linda? ¿Tienes novio?”, agregó el intérprete de “Felices los 4”. Coleoni, quien reside en México desde hace varios años, evadió a Maluma argumentando que fue él quien no se volteó para ser su coach en el programa.
Después de esto, Natalia Jiménez y Carlos Rivera trataron de convencerla de quedarse en su equipo, haciendo alusión a su apariencia. Ambos aseguraron que se veía “sexy, bella y hot” tocando la guitarra, pero Coleoni eligió el equipo de Natalia, con quien interpretó un fragmento de “Knockin’ on Heaven’s Door”, de Bob Dylan.
I kissed Katy Perry and I didn’t like it
Aunque la situación de La Voz México no trascendió mucho, sí recordó a la que protagonizó Katy Perry en las audiciones de American Idol, cuando la cantante besó a Benjamin Glaze, un joven de 19 años. En ese momento, Perry fue criticada por muchos, quienes aseguraban que si eso lo hubiera hecho un hombre se estaría hablando de acoso sexual.
Glaze aseguró que no consideraba la acción de Katy Perry como acoso, pero que se sintió incómodo porque nunca había besado antes a alguien. “Fue un contacto de labios contra una situación romántica con alguien que te importa. De eso es de lo que se trata un primer beso”, reconoció el también cantante.
“No me quejo del beso (…) El objetivo principal del programa es encontrar nuevos artistas y estrellas musicales. Quisiera que mi presentación hubiera sido mejor. Debería haber escogido otro tema para cantar y calmarme a pesar del beso. Debí haber podido cantar bajo presión”, explicó el joven a The New York Times.
Más allá de un debate sobre acoso sexual —que en ambos casos tiene muchas aristas—, tal vez es momento de preguntarnos por qué programas que deberían ser para encontrar diamantes musicales en bruto necesita de este tipo de insinuaciones para captar la atención del público. ¿Será que este tipo de shows ya dieron todo lo que tenían que dar?
