De enero a la fecha, el precio de la gasolina Magna ha aumentado en promedio 24 por ciento en las diversas estaciones de servicio de la capital.
De acuerdo con los empresarios gasolineros, la gasolina Premium –de alto octanaje– ha acumulado un incremento global cercano al 16%; en la capital su precio por litro ya rebasó los 21 pesos.
Mientras que el combustible utilizado principalmente por el transporte público de la ciudad y transporte de carga en la entidad, el diesel, tiene una alza generaliza del 19% de enero a la fecha.
Actualmente el precio promedio de gasolina Magna en la capital se ubica en los 19 pesos con 53 centavos, mientras que la Premium en 21 pesos con 6 centavos y el diesel en 20 pesos con 52 centavos.
No obstante a inicio del año, la gasolina Magna estaba en 16 pesos con 10 centavos, es decir, el aumento ha sido de tres pesos con 43 centavos, en promedio, en relación a su precio actual; la Premium incrementó, 3 pesos con 13 centavos, pues se ubicaba en 17.87 pesos, y el diesel 17.17 centavos, 3.34 pesos se elevó hasta la fecha.
La Secretaría Hacienda explicó que el año comenzaría con un solo precio máximo durante enero y hasta el 3 de febrero, aunado a que en las primeras dos semanas del segundo mes del año habría dos actualizaciones en el precio, pero a partir del sábado 18 de febrero los ajustes al precio son diarios.
Con el alza constante a los combustibles, sectores de transporte, alimentos, medicinas y demás han ajustado sus precios a la alza, pues de enero a la fecha los aumentos no han cesado.
27.8% de aumento en 2 años
Cabe señalar que de enero del 2016 al mismo mes del 2017, el precio de la gasolina Magna pasó de 13.33 a 16.33 pesos por litro, un incremento de 22.5%.
Mientras que para el primer mes del 2018, el precio promedio del carburante se ubicó en 17.03 pesos por litro, un aumento de 4.3%, por lo que el aumento acumulado en los dos últimos años es de 27.8%, de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística (INEGI).
En diciembre de 2017, el Congreso Federal aprobó la fórmula de composición de precios que por segunda vez desagrega los costos logísticos de Pemex, el precio de referencia de la gasolina importada (que asciende a 70% de la demanda), el margen de utilidad para los gasolineros y el componente impositivo, al cual se le permite suavizar mediante un estímulo fiscal o subsidio que reduce el cobro del IEPS cuando hay alzas abruptas, detalla la Comisión Reguladora de Energía.
