Para celebrar el cumpleaños número 90 del Tatamandón, Hilarión Tomás Nicolás Nicolás, se realizó un reconocimiento público por sus servicios que dio desde su juventud a la comunidad de San Juan Colorado, primero como maestro albañil y luego por los diversos cargos destacados en esta población indígena de la Costa oaxaqueña.
Dentro de sus innumerables obras, se destaca como uno de los maestros albañiles que edificaron el templo católico y el palacio municipal de San Juan Colorado.
Hilarión Tomás Nicolás Nicolás, nació en 1930, sus padres fueron Diego Nicolás y Juana Nicolás, entre sus numerosos cargos tradicionales destacan: Mayordomo de San Juan Bautista (fiesta patronal), Mayordomo de San Andrés Apóstol (Feria anual), Fiscal Mayor de la iglesia, Semana (policía comunitario), topil, Cabo y Teniente de Barrio de las Semanas (policía tradicional). Alcalde único constitucional, Suplente de Presidente Municipal.
También fue participante de la Danza de la Malinche, Danza de los Chareos, Danza de la Quijada, Tejorones, Danza de las Mascaritas, Danza de los Maromeros.
Aunque solo estudió el primer año de primaria destacó en la aritmética; tiempo después viajó a la ciudad de México en dónde trabajó de albañil en grandes construcciones como la Basílica de Guadalupe; regresó a San Juan Colorado, su pueblo natal, con conocimientos empíricos de albañilería y edificó las primeras construcciones de material y loza.
Cuentan los otros maestros albañiles que participaron con él, que obtuvieron un plano en la ciudad de Oaxaca hecha por un ingeniero para la edificación del palacio municipal, el cual, tuvo que llevar a cabo el señor Hilarión y el señor Emilio Tapia.
Sin embargo, al presentar el proyecto al pueblo, no les gustó por ser “muy sencillo” por lo que con sus conocimientos adquiridos modificaron el plano y levantaron columnas y arcos, además de hacerlo más grande y diseñarlo de dos plantas, obra que se hizo por medio de tequio y cooperación de todos los ciudadanos de San Juan Colorado.
De esta manera, Hilarión Nicolás Nicolás, dejó como legado uno de los palacios municipales más grandes y bonitos de la región Costa Chica de Oaxaca.
También el Tatamandón, Hilarión Nicolás, planificó el diseño que la autoridad municipal le solicitó y, de esta manera, edificó las dos torres del templo católico cómo actualmente se encuentra.
Por lo que estas dos obras emblemáticas, con más de medio siglo de vida han soportado fuertes terremotos y solo han sufrido daños menores, lo que ha causado la admiración de los habitantes del pueblo hacia quienes (albañiles) que con los conocimientos básicos, pudieron edificarlas.
