La aviación en México, que está próxima a cumplir 120 años de historia, ha experimentado una evolución notable desde los primeros vuelos de globos aerostáticos hasta la implementación de satélites para el control de la navegación aérea. En sus inicios, el transporte aéreo en México emergió en la década de 1920, impulsado por inversiones públicas y privadas a través de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP), y se convirtió en un componente esencial para el desarrollo económico y social del país.
El despegue de la aviación mexicana
Aunque la aviación no era vista como una herramienta bélica efectiva al principio del siglo XX, el gobierno de Porfirio Díaz autorizó la investigación sobre la aerostática, comisionando a Federico Cervantes para estudiar la aviación en Europa. En 1910, Alberto Braniff se convirtió en el primer piloto en realizar un vuelo motorizado en México. Este acontecimiento, realizado en los llanos de Balbuena, significó el primer paso hacia la incorporación de la aviación en el transporte moderno del país.
En 1911, Francisco I. Madero, presidente de México, se convirtió en el primer jefe de Estado en volar a bordo de un avión durante una exhibición, marcando un hito en la historia aeronáutica nacional.
Los primeros servicios aéreos
En la década de 1920, la SCOP se encargó de la planeación y construcción de la infraestructura aérea en México. En 1921, se otorgó la primera concesión para operar rutas aéreas regulares, iniciando así el primer servicio de transporte aéreo de pasajeros en el país. En este mismo periodo, la aviación comenzó a demostrar su relevancia, no solo en el sector civil, sino también en el contexto militar, como lo evidenció su uso durante la Revolución Mexicana (1910-1921) y la Primera Guerra Mundial (1914-1919).
Avances en la aviación mexicana
A lo largo de los años 30, el gobierno de la SCOP trabajó en la creación de aeropuertos en todo México, expandiendo la red de transporte aéreo y mejorando la conectividad. Durante la Segunda Guerra Mundial, México estableció acuerdos con Estados Unidos para construir aeropuertos que no solo fortalecieran la infraestructura aérea, sino que también protegieran el espacio aéreo en caso de emergencia bélica. En este periodo, se construyeron aeropuertos en ciudades clave como Mazatlán, Veracruz y Mérida.

La modernización en los años 60 y 70
En la década de 1960, la aviación mexicana experimentó una gran modernización. Se implementaron tecnologías avanzadas como radares de control de tráfico aéreo y sistemas de aterrizaje por instrumentos (ILS) en los aeropuertos más importantes, como el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. La creación de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) en 1965 permitió la modernización de la infraestructura aeroportuaria y la expansión de la aviación comercial en el país.
La expansión en los 90s
Hacia finales del siglo XX, el gobierno mexicano adoptó una política de transferencia de aeropuertos a la iniciativa privada. Surgieron grandes grupos regionales como el Grupo Aeroportuario Centro Norte (UMA), el Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP) y el Grupo Aeroportuario del Sureste (ASUR). Estos cambios permitieron la construcción de nuevos aeropuertos y la expansión de rutas aéreas, especialmente en el sector turístico.
Los retos del siglo XXI
En 2022, México inauguró el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) con el fin de aliviar la saturación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). Este nuevo aeropuerto forma parte del Sistema Aeroportuario Metropolitano, proyectado para atender la creciente demanda de pasajeros y carga. El impacto de la pandemia por COVID-19 en la aviación mundial obligó a la industria aérea a repensar su futuro, enfrentando nuevos desafíos tecnológicos, energéticos y medioambientales para garantizar su sostenibilidad.
La historia de la aviación en México es un testimonio del esfuerzo y visión del gobierno y la iniciativa privada para crear una infraestructura aérea moderna, con el objetivo de conectar al país con el mundo. A lo largo de un siglo, la aviación mexicana ha experimentado transformaciones significativas que han convertido a México en un referente en el sector aeronáutico de América Latina. Sin embargo, los desafíos del siglo XXI continúan, y el sector aéreo sigue trabajando para adaptarse a los nuevos retos que plantea la tecnología, la sostenibilidad y las emergencias globales.