Destaca en la capital el Barrio  de Santo Tomás Xochimilco 
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Arte y Cultura

Destaca en la capital el Barrio  de Santo Tomás Xochimilco 

Este es uno de los barrios más emblemáticos de Oaxaca en donde viven artesanos textiles destacados


Destaca en la capital el Barrio   de Santo Tomás Xochimilco  | El Imparcial de Oaxaca
Muy pintorescas son las calles del Barrio de Santo Tomás / Fotos: Omar Maya/ Archivo Xochimilco en donde vive gente muy carismática.

El visitar otros lugares tanto de la República Mexicana como de otros países es para tener un intercambio cultural, conocer su historia y su modo actual de vida. Los lugareños bien organizados de cada destino turístico eligen sus mejores cartas para dar una buena presentación y que nos llevemos ese buen sabor de boca de ese viaje. 

En Oaxaca uno de los más bellos barrios, digno representante de los orígenes de la actual Ciudad de Oaxaca de Juárez, es el de Santo Tomás Xochimilco. Xochimilco, traducido del náhuatl significa: “La gente del lugar de las flores”, mientras que Santo Tomás fue el nombre cristiano que los españoles le asignaron a este lugar, aunque aquí es venerada la Virgen del Rosario. 

Anteriormente el acueducto era el sitio donde quienes vivían en este barrio iban con cubetas a traer el agua, este acueducto viene desde San Felipe del Agua y termina en el Templo del Carmen Alto, en la Caja de Agua, y le da mucha belleza a la ciudad, por lo que tiene el título de Patrimonio Cultural de la Ciudad de Oaxaca. Son parte de este acueducto los famosos Arquitos, que le dan una fisonomía propia a este barrio. 

Los callejones del Barrio de Santo Tomás Xochimilco son un lugar imperdible para los turistas. / Fotos: Omar Maya/ Archivo

Es en este barrio en donde radicaban los mejores especialistas en mantelería y en general los artesanos de textiles, pues anteriormente cada barrio tenía una actividad propia en la que se empleaba la mayor parte de la gente que en él habitaban, por ejemplo, en el Barrio del Ex Marquezado se dedicaban a la elaboración del mejor pan y en el Barrio de San José se encontraban los mejores carpinteros.

El templo de Santo Tomás fue erigido a finales del siglo XVI y en esta zona se encontraba también el Seminario Pontificio de la Santa Cruz y en la actualidad aún encontramos artesanos y a muchas familias que se dedican a actividades muy tradicionales como la elaboración del téjate y las nieves que son famosas por sus múltiples sabores e ingredientes.

Durante algunos años se ha realizado la Feria Artesanal en donde participan artesanos y especialistas en gastronomía oaxaqueña. Para ser sinceros visitar este bellísimo y típico barrio es entrar a un túnel del tiempo, pero en donde afortunadamente aún se encuentran los mejores artesanos de textiles, así como de diversas artesanías, negocios de comida y postres muy típicos y muy representativos de la capital del estado. 

El bello templo de Santo Tomás Xochimilco fue erigido a finales del siglo XVI. / Fotos: Omar Maya/ Archivo

Juan Carlos Reyes, un artista con manos mágicas 

El artista del yeso Juan Carlos, quien con sus manos crea bellísimas obras, tanto figuras como decoraciones en techos y paredes de habitaciones y salones, nació el 8 de julio de 1980, él se considera oaxaqueño y ejuteco, ya que tenía tan solo tres años cuando lo trajeron a radicar con sus abuelitos a Ejutla de Crespo, en donde hizo sus estudios y en donde vivió con las costumbres y tradiciones de este histórico municipio; él nació en Naucalpan de Juárez, Estado de México. 

Desde los 13 años empezó a trabajar con el yeso, pues desde niño le gustaba esculpir en los árboles o en piedras, por lo que encontró en el yeso una oportunidad laboral haciendo lo que a él siempre le había gustado, que era dibujar y crear obras. Quien lo indujo a este oficio fue uno de sus tíos con quien aprendió el oficio, Juan Carlos con el tiempo amplió sus habilidades con la creación de figuras y perfeccionando las decoraciones. 

En la decoración en casas él realiza molduras de esquinero, molduras de centro para las lámparas de techo, entre otras. Mientras que cuando trabaja en templos elabora: angelitos, querubines y todo tipo de ornamentos que le encarguen. 

Su mundo es el yeso y el tipo de trabajo que hace es muy variado, ya que se pueden lograr una diversidad de estilos decorativos. Con el tiempo ha ido complementando sus conocimientos para poder realizar o dirigir un trabajo, por lo que también domina la tabla-roca y todo tipo de pastas, haciendo combinaciones armoniosas con pintura. 

Él dice que su vocación es realizar con mucha responsabilidad un trabajo poniendo todo su talento y pasión, ya que esto será su mejor carta de recomendación. 

Le gusta cuando le piden que se inspire y le dan libertad para que él pueda crear una decoración en donde él pueda manifestar su dominio artístico. 

Su gran motivación es su familia, ya que en todo momento tiene el respaldo de su esposa y el gran amor de sus hijos, quienes le comentan su gusto por los trabajos que él realiza. 

Uno de sus sueños es que le permitan decorar un templo en donde él ponga todos sus conocimientos y destreza del manejo del yeso para que su nombre trascienda y deje una huella de su paso por esta tierra.