En un hecho que revive la preocupación por el abigeato en comunidades rurales del Istmo de Tehuantepec, tres hombres fueron detenidos cuando transportaban una cabeza de ganado presuntamente robada. Esto, durante un operativo en el municipio de El Espinal, Oaxaca. La acción fue posible gracias a la denuncia inmediata de un campesino afectado, quien detectó a los responsables mientras huían con parte de sus animales sustraídos.
El afectado informó que durante la madrugada de este martes le fueron robadas 18 cabezas de ganado de su rancho, ubicado sobre la terracería que conecta a la base aérea militar. Al notar el movimiento inusual de una camioneta en la zona, el campesino decidió seguirla y alertar a la Policía Municipal, lo que derivó en la detención de los presuntos responsables.
FUERON DETENIDOS CUANDO TRANSPORTABAN EL GANADO
Gracias a la rápida respuesta del operativo, los policías municipales lograron interceptar el vehículo señalado. En la camioneta encontraron una de las reses reportadas como robadas. El campesino reconoció a los ocupantes como los autores del saqueo nocturno, por lo que fueron detenidos en flagrancia.
Los presuntos responsables fueron identificados como Norberto Rubén y Deyver, ambos con domicilio en la primera sección de Ciudad Ixtepec, así como Robelsi, habitante de la primera sección de Asunción Ixtaltepec. Todos fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para que se inicie la investigación correspondiente.
UNA PRÁCTICA ILEGAL QUE PERSISTE EN LA REGIÓN
El robo de ganado, también conocido como abigeato, sigue afectando a comunidades campesinas del Istmo. Aunque muchas veces no trascienden públicamente, estos delitos tienen efectos devastadores para los pequeños productores, que pierden en horas el fruto de meses de trabajo. Además, la mayoría de los casos no llegan a procesos judiciales efectivos.
Este hecho pone de relieve la urgencia de reforzar la vigilancia rural y de establecer mecanismos de denuncia y respuesta más eficientes. Mientras tanto, los productores continúan expuestos a la inseguridad, sin garantías claras para proteger su patrimonio.
En resumen, el abigeato es un delito que golpea silenciosamente al campo mexicano. No solo se trata de ganado, sino del sustento de familias enteras. La captura de los responsables debe ser solo el inicio de una respuesta más profunda y sistemática para proteger al sector agropecuario frente al crimen.
