“2 de octubre no se olvida. Ni perdón ni olvido”, lanzaron normalistas y un grupo de jóvenes encapuchados quienes marcharon realizando pintas y hechos vandálicos en los juzgados federales del paseo Juárez El Llano, así como en las instalaciones de una caja de ahorro.
En tanto, una representación de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), encabezada por la lideresa, Yenni Pérez Martínez, llevó a cabo un mitin político en el Zócalo de la Ciudad de México.
La conmemoración de la masacre de Tlatelolco, hace 55 años, dejó algunos destrozos y pánico de la gente por las protestas que se han tornado violentas.
Después de las 17:00 horas, un grupo de estudiantes de la Escuela Normal de Educación Especial (ENEE) partió en marcha de la Fuente de las 8 Regiones, sobre calzada Porfirio Díaz; con pintas en las paredes recriminaron al gobierno por los hechos de represión.
A sus consignas, pidieron justicia por los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, Guerrero, el 27 de septiembre de 2014.
Las y los integrantes de la Coordinadora Estudiantil de Normalistas del Estados de Oaxaca (CENEO), avanzaron sobre avenida Juárez, así como en la calle de Morelos, e ingresaron al Zócalo de la ciudad.
En Palacio de Gobierno, policías colocaron vallas metálicas para evitar el ingreso de los estudiantes que plasmaron su inconformidad por este hecho que ocurrió hace 55 años.
Lo mismo pasó en algunos puntos de la ciudad donde establecimientos comerciales, bajaron sus cortinas y reforzaron sus puertas, ante el temor de los destrozos que deja la marcha del 2 de octubre.
Sin embargo, los daños fueron menores en comparación con el 2015 cuando los grupos de encapuchados lanzaron bombas molotov y destruyeron cajeros, y agencias de automóviles por el lado sur de la ciudad de Oaxaca.
Al término de la marcha de ayer, las y los normalistas concluyeron con el himno “Venceremos” frente al Palacio de Gobierno donde exigieron justicia.
Por su lado, la dirigencia de la Sección 22 del SNTE, que lidera Yenni Pérez Martínez, recriminó que el gobierno federal haya blindado Palacio Nacional y no instaló una mesa de diálogo para recibir a manifestantes.
Ahí pidió justicia por la matanza de Tlatelolco, hechos ocurridos en 1968 en la Plaza de las Tres Cultura, en la Ciudad de México.
Dicha concentración se llevaba a cabo en el contexto del movimiento estudiantil que había estallado el 22 de julio de 1968 debido a actos de represión de estudiantes por parte de las fuerzas policiacas del Distrito Federal y de elementos militares.
