Por casi dos meses, lo dicho por el gobierno estatal sobre sanear el tiradero irregular del playón del Atoyac se ha quedado en promesa. Las 3 mil 800 toneladas que se estimaban acumuladas ahí hasta mayo de este año siguen varadas y próximas a cumplir un año. El mismo tiempo en que vecinos, estudiantes y comerciantes han tenido que soportar con las consecuentes afectaciones a la salud que esto provoca.
Las negociaciones van “bien”, según respuesta del presidente municipal, Francisco Martínez Neri, pero estas negociaciones, aclaró, siguen solamente entre gobierno estatal y municipio para definir qué acciones harán para sacar un volumen de residuos por el que se estiman necesarios más de 10 millones de pesos.
Los sindicatos participarán, añadió Martínez Neri sobre los entes a los que están adheridos los recolectores particulares: Confederación de Trabajadores de México (CTM) y Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM).
Nosotros vamos a llevar maquinaria”, dijo el edil sobre labores que siguen sin fecha concreta, pero que no deben de tardar ante la proximidad de las fiestas de Guelaguetza. Tras el retiro de los desechos, adelantó la posibilidad de acordonar para evitar un tiradero como el que comenzó a formarse ahí en julio del año pasado.
Sobre las denuncias de presuntos actos en los que recolectores municipales reciben desechos de unidades particulares, el concejal refirió que ya hay investigaciones y se ha “hablado” para evitar tales conductas.
Adecuan “zona de transferencia”
Este viernes, el municipio “adecuó” el área de transferencia que tiene junto al tiradero clandestino.
Ferdinando Rosado Duarte, secretario de Servicios Municipales, explicó que el espacio se seguirá usando con estos fines ante la falta de otro en donde manejar los residuos que se llevan a depósitos fuera del estado o para compostaje en campos agrícolas.
Además de que hubo una capacitación y reunión con empleados de recolección para mantener el servicio y explicar lo que se ha hecho ante la crisis de la basura que estalló en octubre. Por esta reunión se suspendió la recolección en camiones compactadores ayer, pero se mantuvo el de barrido en calles, dijo Rosado Duarte.
