Un grupo de propietarios y empleados de hoteles del centro histórico de Oaxaca denunció públicamente que, por quejas de la empresaria Alejandra Rivera, el ayuntamiento les ha cerrado 10 hoteles y acabado así con las fuentes de empleo de al menos 50 familias.
Por lo que calificaron como competencia desleal, exigieron la reapertura de sus negocios, pues el cierre ha afectado los únicos ingresos de varias familias.
Este lunes, parte de las y los afectados (principalmente mujeres) protestó en el palacio municipal, a donde más tarde llegó la empresaria Alejandra Rivera, quien se negó a ofrecer declaraciones.
Rocío Blas Rojas, propietaria de un hotel en la calle de Victoria, señaló que por presiones de Rivera (presidenta de la Organización de Empresarios y Comerciantes del Estado de Oaxaca, OECO) y supuestos vecinos del centro histórico, han cerrado establecimientos cuyas licencias están en trámite o a punto de aprobarse.
De acuerdo con Blas, el ayuntamiento que preside Francisco Martínez Neri, les ha explicado que el cierre o clausura de sus negocios se debe a la falta de licencia de operación. Pero consideraron que la acción es arbitraria, debido a que personal de la Secretaría de Desarrollo Económico y de la comisión de Desarrollo Económico, a cargo de la regidora Irasema Aquino, han respaldado la apertura en tanto se concluyen los trámites respectivos.
Asimismo, porque han realizado los pagos respectivos para funcionar, en tanto se resuelven sus licencias.
También acusaron a Rivera de que, con sus presiones, discrimina a las personas indígenas y de la tercera edad que laboran en los hoteles de la zona. O a quienes como ella tienen otro estatus económico.
El pasado jueves, Rivera acudió al palacio para hablar con el presidente municipal, Francisco Martínez Neri, con quien se quejó de las afectaciones a establecimientos comerciales de “giro blanco”, como los suyos, a causa de la operación y apertura de negocios bajo la denominación de hoteles, pero que supuestamente operan como giros negros. Esto al explicar que tales negocios ubicados en calles como Mier y Terán, así como Victoria, ofrecen “servicio exprés” a personas “de mala nota”.
