De acuerdo con los resultados de la novena edición del Índice de Paz México 2021 (IPM), elaborado por el Instituto para la Economía y la Paz (IEP), el estado de Oaxaca fue uno de los 23 estados con ligeras mejoras en su nivel de paz, en tanto nueve experimentaron deterioros.
Este ejercicio de la medición de las tendencias, análisis y estimaciones del impacto económico de la violencia en el país, se lleva a cabo desde el 2015, destaca que la entidad oaxaqueña se ha visto afectado por el desplazamiento de personas y en el nulo avance para la paz positiva, esto derivado del fenómeno de la violencia generada principalmente por el crimen organizado.
En el comparativo del 2020 al 2021, Oaxaca pasó con una calificación de 2.390 a 2.290, entendiendo que entre mayor calificación existe una mayor violencia, por lo que el estado de Yucatán sigue siendo el más pacífico con una calificación de 1.254, mientras los más violentos son Baja California con 4.307 y Zacatecas con 4.227.
Además, detalla que en las calificaciones por pilar de paz positiva, la entidad oaxaqueña aún se encuentra rezagada en el lugar número 31, siendo las instituciones de procuración de justicia con los menores avances en cuanto al libre flujo de información, así como en la aceptación de los derechos de los demás, buen funcionamiento de gobierno y en los niveles altos de corrupción.
En este rubro de Paz Positiva, obtuvo una calificación de 3.963, la media nacional se ubicó en 3.123 y con la mejor calificación que fue el estado de Querétaro tuvo una calificación de 1.428, en tanto el peor posicionado fue Guerrero con 4.122.
En los datos sobre Desplazados Internos en México, en los últimos seis años la violencia ha desplazado a 117 mil 301 personas, solamente en el 2021 este fenómeno desplazó a 44 mil 905 mexicanas y mexicanos, de los cuales dos tercios de los desplazamientos se debieron a la violencia provocada por grupos armados del crimen organizado como los carteles de la droga.
Aunque no se dieron a conocer cifras por entidades federativas, los responsables del informe señalaron que entre 2016 y 2020, más del 97% de los desplazamientos registrados ocurrieron en sólo seis estados: Guerrero, Chiapas, Michoacán, Sinaloa, Chihuahua y Oaxaca.
Los dos estados que registraron la mayor cantidad de desplazamientos, Guerrero y Chiapas, tenían más probabilidades de verse afectados por conflictos políticos, sociales y territoriales, mientras que en otros estados era más probable que la violencia estuviese causada por grupos armados organizados.
Carlos Juárez, director del IEP, calificó como una tragedia el aumento de la violencia que se vive en el país, ya que entre los hallazgos destaca que la violencia organizada sigue siendo el principal impulsor de los altos niveles de violencia y victimización en México.
Explicó que para conocer el nivel de paz que se vive en el país, se ponderaron cinco temas como son el análisis integral sobre la paz basada en evidencias en el que se mide paz negativa, paz positiva y impacto económico de la violencia.
En el campo de estudios sobre la paz, hay un vacío y el crimen organizado está ocupando estos vacíos y por ello el impacto de la violencia, si bien los homicidios disminuyeron por segundo año, la tasa se mantiene en niveles históricos altos con más de 34 mil muertes en el 2021”.
Detalló que la paz en México mejoró un 0.2% en 2021. Este fue el segundo año consecutivo de mejora después de cuatro años consecutivos de deterioro, sin embargo, añadió que las tendencias a más largo plazo indican un marcado deterioro de la paz entre 2015 y 2021.
A nivel global en este periodo, la paz en México se ha deteriorado en un 17.1%, con muchos indicadores de delitos significativamente más altos que hace siete años. La tasa de homicidios en 2021 fue un 76.3% más alta que en 2015.
