Trabajadores del Hospital Regional “Presidente Juárez” del ISSSTE demandaron ayer el cambio de elevadores del nosocomio, ante las constantes fallas que presentan y el riesgo latente de un accidente que pueda generar lesiones o incluso la muerte.
La alarma entre el personal de la institución fue mayor hace unas semanas, luego de que un grupo de trabajadores y pacientes quedaran atrapados por media hora en uno de los elevadores que requiere de mantenimiento de manera constante.
Los denunciantes señalaron que el mal funcionamiento de los elevadores pone en riesgo la integridad del trabajador y del paciente todos los días, con el peligro de sufrir caídas y lesiones de gravedad.
A esto se suma que no haya rampa en el hospital para poder llevar a piso a los pacientes, que deben ser trasladados y cargados por dos y hasta cuatro camilleros, siempre y cuando esa cantidad esté disponible.
Aunque ya se hizo la gestión correspondiente para poder hacer la sustitución de elevadores, de los cuales, uno está completamente detenido, las y los trabajadores aseguraron que a la fecha no hay respuestas satisfactorias.
Hay una empresa que se encarga del mantenimiento de uno de los elevadores, pero se está descomponiendo a cada rato y dos veces al día. Ya es una necesidad imperante, tanto para el trabajador como para el usuario”, expusieron.
Insistieron en la importancia de que los elevadores cuenten con mantenimiento correctivo y no solo preventivo, al considerar que estos tienen una antigüedad de 51 años, al igual que el mismo Hospital Regional.
Margarita Díaz Navarrete, delegada sindical, afirmó que esta situación afecta a todo el personal, desde camilleros, personal del área de cocina y de limpieza, así como a pacientes y sus familiares.
Algunos trabajadores señalaron también que por falta de elevadores y rampas muchos familiares han tenido que cargar a los pacientes para poder llevarlos al segundo piso, mientras que en otros casos, e personal de alimentación ha sufrido caídas y quemaduras con la misma comida, por tropiezos durante el traslado de la dieta a los hospitalizados.
Los manifestantes se reservaron las acciones a realizar en breve si no son atendidos a la brevedad, prometiendo así no afectar a la derechohabiencia por las movilizaciones que puedan emprender.
