Para Pavel Palacios Chávez, director del Área de Protección de Flora y Fauna del Boquerón de Tonalá, el tráfico de especies en peligro de extinción en México y en Oaxaca es grave, dado que es un fenómeno que no se detiene.
Recientemente lo hemos visto en las noticias y en las redes sociales, gente que compra animales exóticos principalmente felinos como mascotas, aunque por su propia naturaleza no es recomendable, dijo el director de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
En el estado se encuentran en peligro de extinción especies como el jaguar cuyos ejemplares suman cerca de 400 en Oaxaca, además de Tapir, Pumas, Mono Araña y Venado cola blanca.
Subrayó que la reducción de actividad humana en sitios con riqueza ecológica, boscosa y de playa, ha tenido un buen impacto en la fauna, dado que los animales vuelven a recorrer nuevos territorios.
“Vemos a gente con tigres en plazas comerciales, es algo que no puede ocurrir porque no es su naturaleza estar amarrado o en espacios pequeños, los felinos no son una mascota”, expuso.
Palacios Chávez dijo que eso genera problemas tanto para los propietarios como para los ejemplares dado que los tienen en un contexto ajeno a la selva o jungla y los tienen sometidos en ambientes urbanos.
Reconoció la importancia de integrar el tema dentro de la currícula de la educación básica, con el fin de generar conciencia y sobre todo acciones por parte de los diversos sectores de la sociedad.
“Ahorita lo que vemos que se mueven más son los pericos al haber compra y venta, pese a los esfuerzos de las autoridades como Profepa y a eso se suma el tráfico de huevos de tortuga”, apuntó.
“Desde la Conanp trabajamos en diferentes frentes para proteger a los felinos y una de ellas es concientización de las comunidades y la sociedad en general sobre la importancia de estas especies en los ecosistemas”, cerró.