Armados con palos y machetes, integrantes del Comité de Defensa de los Derechos del Pueblo (Codep) desquiciaron ayer la ciudad por enésima ocasión desde temprana hora, con una serie de bloqueos y la retención de varias unidades del transporte público.
En la exigencia de solución a sus demandas sociales, los manifestantes se apoderaron por varias horas de la caseta de cobro de San Pablo Huitzo, donde fijaron cuotas a los automovilistas de 50 a 100 pesos, según el tamaño de la unidad.
Al mismo tiempo, otro grupo de la organización se concentró en un bloqueo en el crucero de Hacienda Blanca, donde amenazaron a los conductores con piedras y palos, sin intentaban pasar.
Por cuarto día consecutivo, los militantes de esta organización que además instalaron un plantón en el Zócalo de la ciudad en plena contingencia sanitaria por el nuevo coronavirus, retuvieron con violencia más de una decena de unidades de transporte público, así como una pipa de Petróleos Mexicanos (Pemex).
También realizaron bloqueos en las inmediaciones del crucero del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), la Avenida Independencia y el Monumento a Juárez rumbo a Huayapam, así como en las cercanías del Panteón Jardín y el crucero del Aeropuerto.
La protesta generó afectaciones a cientos de usuarios del transporte urbano, así como trabajadores del sector establecido e informal, que tuvieron que caminar o buscar vías alternas para llegar a sus destinos.
Los integrantes del Codep, que desde el miércoles pidieron una mesa de diálogo y negociación con las autoridades del Gobierno del estado, en la exigencia de mejoras en infraestructura de sus comunidades y de justicia en varios asesinatos de sus militantes, amenazaron con radicalizar protestas en las próximas horas.
Aseguraron que hace unos días rompieron la mesa de negociación con funcionarios de la Secretaría General de Gobierno (Segego), ante la falta de acuerdos por escrito y las promesas que no garantizan su cumplimiento a la brevedad.
