Al menos 8 municipios han sido afectados por la veda sanitaria que estableció la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), por la presencia de marea roja en la zona costera de Oaxaca, como no había sucedido en los últimos ocho años.
Las autoridades de salud que realizan un monitoreo cada tercer día, aseguraron que la veda sanitaria se mantiene hasta nuevo aviso y queda prohibida la extracción, venta y consumo de productos del mar con doble concha como almejas, caracoles, callo de hacha y ostiones.
La medida precautoria establece los municipios de Santa María Huatulco, Pochutla, Pinotepa Nacional, Santa María Colotepec, San Pedro Mixtepec, Villa de Tututepec, Santa María Huazolotitlán y Santa María Tonameca.
De este último municipio, según los registros de Cofepris, desde el 18 de diciembre se estableció la veda sanitaria con fines de protección a la salud pública, sobre todo en el área de cosecha denominada Agua Blanca, esto derivado de un aumento en los valores de saxitoxina en moluscos bivalvos, superior a lo establecido en la Norma Oficial Mexicana (NOM-242-SSA1 2009).
Mientras no se levante la veda sanitaria, las autoridades de salud también se mantendrán en acciones de vigilancia sanitaria en los establecimientos de comida en la región de la Costa, además de brindar información a la población sobre los signos y síntomas de alerta ante una posible intoxicación.
Las autoridades de salud dejaron en claro que las actividades recreativas en las playas, así como el consumo de otros productos del mar como el pescado, camarones, jaiba y langosta, no se ven afectados por este fenómeno.
Advirtieron que una intoxicación ocasionada por la ingesta de productos de mar infectados con toxinas de marea roja, tiene serias consecuencias para la salud.
Los síntomas de intoxicación pueden presentarse de 20 a 40 minutos después del consumo y estas se identifican por presentar parálisis periférica, sensación de hormigueo, somnolencia, entumecimiento, vértigo y sensación de obstrucción de la garganta.
Así también, falta de coordinación muscular del cuerpo, dolor de cabeza, taquicardia, sed intensa, ligera hipotermia, visión borrosa, vómitos, diarrea y dolor abdominal.
De acuerdo a registros del sector salud, esta veda no había abarcado toda la costera oaxaqueña en los últimos años, como sucedió en 2011, cuando este fenómeno duró siete meses.
