La primera dama planeaba abogar por su campaña el martes en Tennessee durante una visita al Hospital Infantil Monroe Carell Jr. en Vanderbilt, en Nashville, en lo que será su primer viaje doméstico para destacar la iniciativa. La Sra. Trump estaba participando en una discusión sobre los bebés que nacen dependientes de las drogas, recorren una unidad de cuidados intensivos neonatales y visitan a los pacientes.
Poco ha hecho personalmente para publicitar la campaña en todo el país desde que la develó en la Casa Blanca en mayo.
Una semana después del anuncio, la primera dama fue hospitalizada por una cirugía de riñón, se quedó cinco noches y luego pasó varias semanas fuera del centro de atención recuperándose antes de reanudar un horario público. Desde entonces, ha realizado dos viajes a la frontera de México y los Estados Unidos para reunirse con adultos y niños afectados por la política del presidente de separar a las familias de inmigrantes que cruzan ilegalmente a los EU.
La primera dama promovió “Be Best”, que se centra en el bienestar de los niños, el uso de las redes sociales y el abuso de opiáceos, cuando acompañó al presidente a Londres este mes. Ella también lo ha discutido durante visitas sorpresa en el área de Washington, incluyendo un viaje no anunciado al Centro de Innovación y Política de Microsoft la semana pasada.
La Sra. Trump visitó a un grupo de estudiantes que ayudan al fabricante de programas informáticos con su trabajo sobre la seguridad en línea centrada en la juventud. Ser buenos ciudadanos en línea es uno de los focos de la campaña de la primera dama, aunque su marido es criticado rutinariamente por usar Twitter contra sus enemigos.
Ver a los estudiantes actuar y ser líderes positivos en el mundo digital para los jóvenes es exactamente lo que se enfoca en ‘Be Best’, dijo la primera dama después de visitar a Microsoft.
El problema que la lleva a Tennessee es el síndrome de abstinencia neonatal, que ocurre cuando un bebé se retira de las drogas, generalmente un analgésico opioide, al que estuvo expuesto en el útero. La abstinencia causa síntomas tales como irritabilidad, temblores musculares, dificultad para comer y dormir, y problemas respiratorios, según el testimonio que el doctor Stephen Patrick, pediatra y neonatólogo del hospital infantil que la primera dama tiene programado visitar, dio este año a un comité legislativo del estado de Tennessee. Patrick es parte del equipo médico que se reunirá con la primera dama.
Los opiáceos están alimentando la epidemia más mortal de sobredosis de drogas en la historia de los Estados Unidos. Alrededor de 70 mil estadounidenses murieron de una sobredosis de drogas el año pasado, según cifras preliminares publicadas este mes por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Eso es un aumento del 10 por ciento del año anterior.
La práctica de las primeras damas usando sus posiciones de prominencia para promover temas y causas que les importan se puede remontar a Martha Washington, la primera dama original de Estados Unidos. Ella era una defensora de los veteranos de la Guerra Revolucionaria, dijo Anita McBride, ejecutiva en residencia en el Centro de Estudios Congresionales y Presidenciales de la Universidad Americana.
Cada primera dama ha hecho algo, dijo McBride, quien fue jefa de personal de Laura Bush cuando era primera dama.
Uno de los viajes de la Sra. Trump a la frontera fue eclipsado por una chaqueta con capucha que llevaba que tenía, “Realmente no me importa, ¿verdad?” Garabateado en la parte posterior. La elección de la vestimenta para el viaje de Texas rebotó en Internet, generando memes sobre qué mensaje podría haber estado tratando de enviar la ex modelo.
Su portavoz dijo que era solo una chaqueta sin mensaje oculto. Pero el presidente socavó eso al twittear más tarde que su esposa realmente estaba diciendo que no le importaban los medios de “noticias falsas”.
