Autoridades comunales y ejidales que convergen en los Valles Centrales, han frenado al menos cuatro proyectos de libramientos con los que se pretendían resolver el problema de movilidad en la Zona Metropolitana de Oaxaca.
Proyectos como el Libramiento Norte, Libramiento Sur de la ciudad de Oaxaca o también conocido como Corredor Turístico de los Valles Centrales; así como Libramiento de Oaxaca y un cuarto de mayor longitud realizado por la SCT, han quedado solo en trazos y promesas incumplidas.
El Libramiento Norte que tiene su recorrido en el municipio de Oaxaca de Juárez con 13 kilómetros, es el más corto y el primero en ejecutarse en 1991 durante el gobierno de Heladio Ramírez López, pero a pesar de que se avanzó en un 90 por ciento del tramo proyectado, quedó inconcluso debido a la inconformidad de los comuneros de las diferentes agencias municipales como de Viguera y San Felipe del Agua.
Los otros tres proyectos carreteros que recorrerían el sur de los Valles Centrales como el Libramiento Sur de la ciudad de Oaxaca o Corredor Turístico de los Valles Centrales quedaron estancados debido a la oposición de las organizaciones sociales y autoridades ejidales que se negaron a ceder parte de sus tierras.
El Libramiento de Oaxaca fue un proyecto alterno al Corredor Turístico, mientras que el trazo que realizó la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (Centro SCT Oaxaca), nunca arrancó, por ello únicamente se quedaron en proyectos ejecutivos, dos de estos con estudios de impacto ambiental y recursos para iniciarse pero nunca arrancaron.
Para el Corredor Turístico se contemplaron en 2008 una inversión de más de 4 mil millones de pesos; en 2013, el Congreso del Estado aprobó un presupuesto de mil 500 millones para dicho proyecto, y a la fecha no existen pistas sobre el destino de este recurso.
Como señala el estudio de la empresa Zambrano y Asociados, la proyección de estas grandes obras de vialidad, tendrían como propósito canalizar el tráfico foráneo tanto de bienes como de personas que actualmente circula dentro de la ciudad de Oaxaca.
Así como agilizar los tiempos de recorrido mediante la reducción de los problemas de congestionamiento vial en las principales avenidas de la ciudad, específicamente la Carretera Panamericana o Carretera Federal 190 y sus principales conexiones.
De acuerdo con los especialistas que realizaron uno de los proyectos, estas vialidades también ayudarían a reducir la generación de contaminantes atmosféricos, ruido y vibraciones y el consumo de combustible de los vehículos que actualmente experimentan congestión vial debido a su interacción con el tráfico foráneo.
Explican que de las tres que se planearon sobre la parte sur de los Valles Centrales fue porque se contempló las extensas actividades socioeconómicas que existe en la región. El “Libramiento Sur de la ciudad de Oaxaca” 56.5 kilómetros; “Libramiento de Oaxaca, con una longitud de 54 Km, en el estado de Oaxaca”.
Estos proyectos tienen similitudes como se señala en el documento, pues todos se desarrollan sobre las laderas de las cordilleras que bordean los Valles Centrales y el Valle de Tlacolula, además de que fueron proyectadas en su momento por las autoridades estatales a través de Caminos y Aeropistas de Oaxaca (CAO).
En su momento, la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (Centro SCT Oaxaca), también contempló un proyecto alternativo de mayor extensión, pero a largo plazo con más de 66 kilómetros que se alejaría aún más de la ciudad capital.
