Academia Indígena de México mantiene actividad en Oaxaca
Siguen preparándose fieles a su costumbre competitiva
Los integrantes de la Academia Indígena de México (AIM), mantienen sus actividades, acuartelados en sus instalaciones de San Pablo Etla, esperan que pronto pase la cuarentena promovida por el Covid-19, desde hace ya casi dos meses.
Encabezados por su titular Sergio Ramírez Zúñiga, el grupo de 30 jóvenes, entre los que encuentra la primera generación de los Gigantes Descalzos de la Montaña, trabajan y estudian todos los días.
Por la mañana muy temprano luego de arreglar sus habitaciones, los integrantes de AIM, comienzan con su actividad deportiva que incluyen clases de zumba, así como de ejercicios aeróbicos, esto les da la fortaleza necesaria para seguir continuando con el resto del día.
Tras esto el desayuno es imprescindible, al término del cual llevan a cabo clases de sus diferentes materias, como álgebra, ciencias sociales, entre otras, sin perder el perfeccionamiento del inglés que es primordial.
Luego de decretarse la suspensión de actividades por el Covid- 19 en el mundo, Ramírez Zúñiga recibió a todos los integrantes, con el fin de seguirlos preparando en camino a sus estudios profesionales, tanto en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), así como en el Colegio Militar, en ambos casos ya mostraron interés de seguir.
Mientras esto pasa la preparación es importante, dijo Ramírez Zúñiga, dijo que para evitar algún posible contagio no se permiten visitas durante estas fechas.
El programa surgió hace unos 10 años en las montañas de la Mixteca Baja, la región Triqui, marcada durante mucho tiempo por la falta de oportunidad y la violencia, así como la expulsión de sus jóvenes a los Estados Unidos.
La integración del programa de Ramírez Zúñiga abrió otra puerta a los niños, pues a través del deporte y el estudio ahora aspiran a ser profesionistas, pero sobre todo comprometidos con su gente a la que esperan regresar con el tiempo para ayudarlos.
Cuando se esperaba la culminación del programa, ahora resurge nuevamente en la Mixteca, muy cerca de Nochixtlán, donde se forjan las nuevas figuras del deporte y del estudio de Oaxaca.
