Oaxaca, destino seguro
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Editorial

Oaxaca, destino seguro

 


En medio de la tragedia que hemos vivido en los últimos tiempos, hace unos días la entidad oaxaqueña recibió una bocanada de aire fresco a su golpeado destino. El Aeropuerto Internacional de Oaxaca obtuvo el sello Safe Travels del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), luego de haber cumplido los protocolos y medidas sanitarias para evitar contagios de coronavirus o Covid-19. Se trata de un reconocimiento a nivel internacional justo cuando los países de la Comunidad Económica Europea (CEE), han cerrado prácticamente sus accesos al turismo mexicano. La distinción a que hacemos referencia, es relativa a la seguridad que nuestro principal puerto aéreo otorga al pasajero, toda vez que el mismo puede transitar libremente sin poner en riesgo su salud o su vida, al cumplir con las medidas de seguridad e higiene recomendadas por las diferentes dependencias tanto nacionales como internacionales.

Oaxaca ha acumulado durante los últimos años, una serie de reconocimientos internacionales que, a veces, parecieran minimizarse entre los mismos oaxaqueños. Por ejemplo, el año pasado, la prestigiada revista Travel & Leisure, consideró a nuestra capital, como uno de los destinos más bellos y atractivos en el mundo. Otras publicaciones del mercado turístico mundial han hecho lo propio, principalmente algunas ligadas con la gastronomía. Sin embargo, en virtud de la emergencia sanitaria que estamos viviendo, este mes de julio será uno de los más tristes de que tengamos memoria. Incomparable aún con el que los citadinos vivimos durante el movimiento político y social de 2006, cuando turbas de maestros radicales y dirigentes de pseudo izquierda, tomaron La Guelaguetza como botín político.

No obstante, la riqueza cultural, artística, gastronómica, étnica, lingüística, etc., de nuestra entidad, sigue permeando en el mercado turístico de México y el mundo, en donde Oaxaca no es una entidad ajena. La afluencia de visitantes del país y el extranjero que tenemos en temporada altas como julio o diciembre, y aún en fines de semana largos –que volverán a ponerse en marcha- reflejan el gran atractivo que representan la capital, los Valles Centrales y los dos destinos de playa más importantes: Huatulco y Puerto Escondido. Esperamos que breve volvamos a esa nueva normalidad de que hablan tanto las autoridades, que cada día parece estar más lejana.

Preocupante realidad

La semana pasada el titular de los Servicios de Salud en Oaxaca (SSO), Donato Casas Escamilla se reunió con los médicos, enfermeras y demás trabajadores sanitarios del Hospital General “Macedonio Benítez Fuentes” de Juchitán de Zaragoza, quienes han realizado protestas, en virtud de estar padeciendo un severo problema de contagios por Covid-19. Se habla incluso de cuatro personas ya fallecidas. El viernes, sindicalizados protestaron en el Hospital de Tuxtepec. No es un tema simple que las autoridades deban soslayar. Es un asunto complejo y real que se ha venido arrastrando durante el período de la contingencia, en la cual, hasta el viernes de la semana pasada se contabilizaban más de mil contagios entre el personal que atiende los hospitales para la atención de dicho mal. La protesta no es ociosa o en base a demandas irrealizables, sino en legítima defensa de su trabajo y de su vida, habida cuenta de que, como ya hemos dicho, médicos, enfermeras, afanadores (as), camilleros, personal de limpieza y otros, han entregado ya algunas vidas en esta cruzada, de la que tienen la encomienda.

Hasta el viernes de la semana pasada se contabilizaba una cantidad considerable como hemos dicho, entre el personal sanitario e incluso, se ha probado que aproximadamente el 20% de los contagios y activos, se han dado en médicos y enfermeras. Sin embargo, sobre todo en el Istmo de Tehuantepec, ello no implica que no se presenten en otras regiones, también el dengue ha causado estragos en la población. Lo más lamentable es que los síntomas: temperatura mayor a los 38 grados, cansancio, dolor de cuerpo, excepto la dificultad para respirar, son similares a los del Covid-19. Ello ha generado confusión entre la población, pues ya es un hecho que a quienes fallecen en esta temporada de emergencia sanitaria, la etiqueta única es que mueren de coronavirus.

Ya hemos mencionado en los últimos segmentos editoriales y otros espacios de EL IMPARCIAL. El Mejor diario de Oaxaca que, en una actitud irresponsable, el gobierno federal, a través del Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, nos han ubicado en semáforo amarillo, cuando la pandemia en Oaxaca no nos ha dado tregua, pues los contagios y decesos siguen al alza. Esta situación ha generado, asimismo, confusión entre la población, pues si bien el ayuntamiento de la capital ha decretado seguir con el cierre de labores no esenciales, la Federación abre la puerta para que la gente salga a la calle, con el riesgo de un repunte del mal.


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