Salir del TLCAN, podría ser bueno
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Opinión

Detalles

Salir del TLCAN, podría ser bueno

 


Este miércoles se llevó a cabo la cuarta ronda de negociación del TLCAN entre México, Estados Unidos y Canadá, previéndose que no haya acuerdo con los vecinos fronterizos del norte, porque así se podría presionar a México y a Canadá para que ya no hubiera Tratado de Libre Comercio entre los tres.

En otras palabras, vislumbran un panorama en el cual solamente existirían acuerdos bilaterales Estados Unidos-México, Estados Unidos-Canadá.

Entonces, qué pasaría si México quedara fuera de este acuerdo, sería negativo o realmente sería un respiro para nuestra gastada economía, la verdad es que casi todo lo que producimos se exporta a Estados Unidos e importamos enormes cantidades de comida y combustibles refinados.

Poniéndolo en términos coloquiales, dependemos de Estados Unidos como unos borregos pastando en potreros peligrosos.
Quizá algo positivo esté saliendo con las políticas proteccionistas de Donald Trump, ya que se podría lograr que los países subdesarrollados recobren el cuidado de su estructura productiva, esto quiere decir que las presiones de Estados Unidos a los países tercermundistas provocarían una reactivación económica en ellos.

Y si se fortaleciera la economía de los países subdesarrollados, incluyendo a México, se podría frenar la migración, porque habría fuentes de empleo y la gente podría comer; cada vez estamos más pobres, la canasta básica es incosteable para la mayoría de los asalariados y con estas políticas nacionalistas se recuperaría la ruta de la producción de comida.
Qué triste es que México produzca para el mercado norteamericano, por ejemplo, hasta las flores como las rosan se exportan al gusto de los consumidores estadounidenses, principalmente a Nueva York, y con esto descuidamos la producción de básicos como maíz, frijol, arroz, trigo, arroz, jitomate y chile.

La dieta mexicana de los pobres está basada en maíz criollo que tiene proteína vegetal de alta calidad, frijol y chile, pero exportarnos en vez de consumir lo nacional, y compramos productos transgénicos que están causando problemas de salud, provocando así que comamos comida de baja de calidad y, para colmo, hasta importamos chiles de China.

Exportamos carne, leche, azúcares, cereales, frutas y hortalizas de alta calidad, por ejemplo, becerros en pie que son engordados en Estados Unidos y estos regresan a México convertidos en carne para hamburguesas de las trasnacionales de fast food, en lugar de que se produjera carne de calidad para el mercado nacional a precios bajos.

Es correcto que se vendan sólo los excedentes, urge que los mexicanos comamos bien, importamos maíz gringo de baja calidad, eso no es bueno, mejor deberíamos comer maíces criollos, en México de las 64 razas que se reportan 59 se pueden considerar nativas.

Por ejemplo, el zapalote chico que proviene del Istmo de Tehuantepec, este grano es súper resistente a las corrientes de aire y tiene una gran cantidad y calidad de proteína, el maestro Francisco Toledo defiende a los maíces criollos, y eso deberíamos hacer todos.

Regresando a la posible fractura del TLACN, otro punto positivo sería intentar disminuir la dependencia económica con Estados Unidos, México es un país deficitario crónico en el saldo de la Balanza de Pagos entre importaciones y exportaciones con el mundo, siempre gastamos más de lo que vendemos.

En las casas vivimos “a la mexicana” estamos endeudados con los créditos y los ingresos no cubren nuestras deudas, así le pasa al país en su mal enfocada política internacional.

En 2015 el saldo de la Balanza de Pagos fue menos 14 mil 609 millones de dólares; en 2016, menos 13 mil 136 millones de dólares y en el primer trimestre de 2017 hubo un déficit de menos 6 mil 859 millones de dólares.
Compramos más de los que vendemos, somos un país “moderno”, endeudado y adquirimos comida del exterior, en lugar de producirla para nuestras propias mesas.

Yo creo que sí nos convendría salir del TLCAN, porque se podrían diversificar los mercados con el mundo, suena muy complicado, pero no lo es, se requiere soberanía nacional y autodeterminación de los gobiernos, algo así como aflojar la soga que tenemos con Estados Unidos.