La tregua de Dios
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Opinión

Debates y Deslindes

La tregua de Dios

 


“Sin seguridad para los mexicanos no habrá Cuarta T” expreso AMLO por tercera ocasión desde que fue electo presidente. Si su gobierno fracasa contra la violencia y el narcotráfico habrá fracasado, según él, la cuarta transformación. No estoy totalmente de acuerdo. La 4T es más que la lucha contra la presencia del crimen organizado instalado desde hace 50 años en nuestro país. Pero, sin duda, el pronóstico es grave y doloroso. El hombre que siempre sonríe expresa su preocupación ante los hechos de violencia que se han dado desde hace cinco sexenios y durante los tres años de su gobierno, a pesar de que se ha cambiado totalmente de estrategia en la lucha contra el crimen organizado.
Todo parece indicar que estamos llegando a un punto que deben de verse resultados o es necesario un cambio de estrategia. La situación complicada por la pandemia en todo el mundo ha planteado a los países diversas crisis y en el nuestro la situación económica, medica, de relaciones sociales, amplificada por una prensa hostil y por las redes sociales, está tomando derroteros desconocidos. No hay un solo día en el cual no haya asesinatos, ataques a las autoridades o muertos civiles que nada tienen que ver con los conflictos. La situación preocupa a varios gobiernos estatales, pero sobre todo preocupa y ocupa al presidente quien ha declarado varias veces que no dará ordenes de disparar y reiniciar las masacres que vivió el país. Se están utilizando otras estrategias y no hay posibilidad de volver a la matanza de seres humanos.
Cuando en la selva ocurre una gran tragedia, una inundación, un incendio o alguna catástrofe que amenaza a todos y se asustan los animales porque los acontecimientos van más allá de su inteligencia. En ese momento, las fieras, las alimañas y los animales pacíficos se unen, comparten refugios y se protegen unos a otros, sin dañarse, sin despedazarse entre sí. Hay un absoluto respeto hasta que pasa la crisis, los campesinos llaman a esto “La tregua de Dios”.
Todo parece indicar que los grupos criminales que actúan en el país tratan de imponer el terror, aunque sea temporalmente y amedrentar a la población hasta que llega la Guardia Nacional, el Ejército o la Marina. Actúan sin límites a su violencia aprovechando el clima de libertad que prevalece en este momento en la nación. La situación la aprovecha también la población civil que ahora que no hay represiones a las protestas, las inconformes pueden llevar hasta límites insospechados sus quejas a las autoridades. Hasta ahora muy pocos son los que se han quedado sin respuesta.
No es posible que no exista una estrategia política contra la violencia, hay sin duda una política que busca delimitar o desterrar completamente las masacres de civiles, las amenazas a las poblaciones, las matanzas para calentar las plazas, como declaró uno de los asesinos que participó en Reynosa, donde mataron a gente inocente y no beligerante para “calentar la plaza”. Para vivir al borde del terror y de la adrenalina. Cuando gobernaba el presidente John Kennedy los reporteros lo cuestionaron porque había acciones de gobierno que no daba a conocer hasta que estaban consumadas. Kennedy aceptó que así era porque en los gobiernos hay diversos tipos de acciones principalmente las de guerra, en esa época contra Corea y contra Cuba, que no podían darse a conocer anticipadamente pues eran acciones secretas. Yo creo que en el caso de México y la lucha contra el crimen organizado hay una serie de acciones que merecen, si no el secreto, si la discreción necesaria para que puedan llevarse a cabo. Espero que pronto haya resultados satisfactorios. La crisis mundial y las crisis que existen en todas las naciones nos hacen pensar en la necesidad de que pronto haya una “tregua de Dios” para toda la humanidad.
Cuba si, Cuba Si, Cuba si, yanquis no
Así coreábamos en las manifestaciones en los años 60 y setenta cuando salíamos por las calles de la ciudad de México para apoyar a la Revolución Cubana, aunque en las décadas en que la isla ha sido gobernada por los hermanos Castro, han existido una serie de claroscuros que se dieron básicamente por el bloqueo de los Estados Unidos al gobierno de los barbudos.
México, salvo con Vicente Fox y Felipe Calderón, nunca ha dejado de tener una excelente relación el gobierno y el pueblo de Cuba con nuestro país. En la época de don José López Portillo cuando se rumoró que entre la Unión Soviética de aquella época y los Estados Unidos se pensaba canjear la parte del Berlín oriental por Cuba, el presidente de México visitó la isla para expresarle su apoyo. En la Plaza de la Revolución de La Habana pronunció una de las piezas de oratoria más importantes de su gobierno de apoyo a los cubanos. “Nada soportaremos contra Cuba, lo sentiremos como propio”. Dijo don José en esa concentración memorable.
Ahora, como parte de la crisis mundial producida por la pandemia del Covid-19 y sus derivaciones surgieron hace 8 días manifestaciones en La Habana y en otras poblaciones. Los enemigos de los cubanos, de aquí y de allá, tomaron como pretexto estas protestas para augurar el fin del gobierno cubano inventando grandes historias, falsificando fotografías, escribiendo textos sobre realidades inexistentes y augurando el fin de la era de los Castro. La fantasía y los malos deseos no han tenido límite. Después de más de 60 años la palabra Cuba enciende las pasiones de personas para las cuales la revolución cubana en una historia lejana y distante. Fin