Cartas abiertas en la sucesión

Desde que se instauró la etapa civil y aún antes, los presidentes en turno eligen al que planean sea su sucesor, aunque finalmente son los electores los que deciden si hacen realidad los deseos del mandatario en turno. 

Solamente dos presidentes de la república no pudieron sacar avante a su “delfín”: Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa, ya que fueron derrotados en su intento por la propia militancia de su partido. 

En el caso de los priístas, todos consiguieron imponer su voluntad, aunque dos de ellos se equivocaron y los electores dieron su total rechazo al propósito. 

Carlos Salinas de Gortari consiguió hasta en dos ocasiones sembrar a su favorito, ya que el proyecto original (Luis Donaldo Colosio) fue asesinado en Lomas Taurinas. 

El arribo de un tercer partido al Ejecutivo federal muestra que las estrategias no han cambiado y que, como sus antecesores, el actual presidente desea imponer a su candidato, al igual que se hizo en el pasado. 

Por eso decidió mostrar las cartas con que cuenta al viejo estilo, sin esconder la baraja ni recurrir a trucos de magia. 

Lo hace sabedor de que su baraja no es tan amplia, como lo podía ser en el pasado, ya que su gabinete es más de sombras que de luces. 

Es cierto que tiene algunas cartas competentes en el área en que fueron asignados, pero también que hay otros que han sido calificados de floreros y unos más que ni sombra proyectan y caen en el total anonimato. 

Por eso, astuto y conocedor de la política como es, el presidente decidió adelantar tiempos, para poder construir la candidatura anhelada y no dar tiempo para tropiezos o enredos que complican el asunto. 

Los nombres están en el aire, mencionados una y otra vez, con inclusiones de personajes que saben desde el inicio que no forman parte del proyecto de sucesión, pero que incluidos en ella les dan alegría y la posibilidad de ver hacia adelante. 

Varios de esos personajes tuvieron una oportunidad en el pasado, pero por razones diversas no pudieron alcanzar la nominación de su partido. 

El mayor ejemplo de ellos es Marcelo Ebrard Casaubon, secretario de Relaciones Exteriores, quien en 2012 pudo ser el candidato del PRD y sus aliados, pero que prefirió bajarse para dar una segunda oportunidad a Andrés Manuel López Obrador. Hay quienes piensan que lo hizo en razón de que advertía, ya desde entonces, que la L12 del Metro daría problemas, por la premura con que fue construida. 

Sin embargo, para otros la no participación de Marcelo (se asegura que fue rebasado por López Obrador en una encuesta interna) se debió a un acto de lealtad con el personaje que lo rescató de la oscuridad en que se encontraba y le dio una segunda oportunidad al sacarlo de la secretaría de Seguridad Pública. 

Esteban Moctezuma Barragán, actual embajador de México en Estados Unidos, es uno de esos personajes que no aportan mucho, pero que cuenta con una gran suerte. Fue defenestrado como secretario de Gobernación, sacado del ostracismo para hacerlo senador y secretario de Desarrollo Social, en su mejor momento político. Luego fue coordinador de la campaña presidencial de Francisco Labastida en la que salió derrotado el priista y fue rescatado por Elba Esther Gordillo, Ricardo Salinas y Andrés Manuel López Obrador. Su posible candidatura no la cree ni él. 

De Juan Ramón de la Fuente uno de los comunes chascarrillos de Ernesto Zedillo lo retrata. Este doctor no cura ni un pulque, refería en alusión al psiquiatra que hoy es embajador en la ONU. Es cierto que fue un buen Rector de la UNAM, pero también hay que recordar que fue impuesto en el cargo, con la ayuda de las fuerzas armadas. Como secretario de Salud no destacó y en 2006 algunos amigos y seguidores lo invitaron a participar como candidato rehusando hacerlo.  

De entre los otros mencionados o incluso, algunos de los que se integren al gabinete o algún gobernador se podría conformar la baraja real del presidente. 

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Finalmente, la Jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum decidió ajustar su equipo de trabajo y designó al senador Martí Batres Guadarrama, como secretario de Gobierno y Alfonso Suárez del Real pasa a ocupar la Oficina de la Jefatura de Gobierno. La Jefa de Gobierno también designó a otros colaboradores en la secretaría particular y el área de prensa…César Cravioto ocupara la posición de senador propietario. 

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