Cisma en el PAN
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Opinión

Columna sin nombre

Cisma en el PAN

 


Vamos a ver para dónde tira FOX, si para el monte o para el jardín de margaritas. El Mapache Guasón.

Finalmente, después de muchos escarceos, Margarita Zavala renunció al PAN.

El rompimiento en el Partido Acción Nacional, se debe entre otras cosas a la soberbia y falta de calidad de dirigente del señor Ricardo Anaya, presidente nacional de los azules.

En efecto, durante los años que lleva al frente del PAN, en lugar de unir a los militantes distinguidos, ha bloqueado sin misericordia a la señora Margarita Zavala, y le ha impedido ocupar un puesto ya público ya en la cúpula del PAN.

En este orden de ideas, vemos como este señor Anaya pretende ser candidato a la Presidencia de la República Mexicana, y ni siquiera es competente para unificar a los panistas.

El cisma tendrá repercusiones amplias en ese partido, ya que la señora Zavala se llevará consigo muchos, pero muchos de los votos de la militancia panista en todo el país.

Si cometió un error, eso está por verse, ya que es evidente que su experimentado grupo calculó todas las posibilidades al futuro y seguramente por eso decidió Margarita retirarse del partido de sus amores.

Algo similar sucedió en el PRI el siglo pasado, cuando Cuauhtémoc Cárdenas renunció a los tricolores, al no alcanzar la candidatura presidencial y se lanzó por la libre al formar aquel Frente Cardenista de Liberación Nacional, que puso en apuros al PRI de la época, para luego, ya resentido, formar el Partito de la Revolución Democrática, PRD, y aquí estamos.

Si Margarita efectivamente se inscribe como candidata independiente, va a llevar como aliados a muchísimos panistas, tanto para obtener cosa de ochocientas sesenta y seis mil firmas para formalizar esa candidatura independiente, así como seguramente para llevar a cabo una campaña eficaz y tratar de alcanzar millones de votos en el dos mil dieciocho.

No hay que olvidar que su esposo el expresidente Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, conserva contactos entre todas las huestes azules en el país, y desde luego es natural pensar que no se lanzaron como El Borras, sino que lo hicieron después de un cálculo con base en la experiencia de ese grupo político.
Como sea, a mi juicio el gran perdedor en este affaire es el güerito Anaya, quien enseñó que está muy verde como dirigente y que francamente es aprendiz de dictador.

La incógnita que sobresale, es ver si Calderón y su grupo, entre ellos destacados senadores, renuncian también al PAN, o permanecen dentro para empujar a la militancia a votar, en su caso, por Margarita.
Rechazo por absurda la idea que el PRI intervino en esta renuncia, tanto porque los azules no lo hubieran permitido, así como por que es muy evidente la actitud torpe, políticamente hablando, de Ricardo Anaya.

Que el PRI sale beneficiado con Margarita en las boletas del dos mil dieciocho, bueno, es evidente, porque quienes voten por ella no lo harán por el PAN, obvio, y desde luego que además de todo lo expresado, el Frente que están formando el PRD y el PAN, también recibe un golpe muy duro, porque si logra la candidatura PRD PAN Anaya, será un candidato desprestigiado, y si por encima de eso la señora Alejandra Barrales Presidenta del PRD, entregada al PAN, se aferra a esa situación y logra la candidatura para la CDMX, bueno, a ver quién vota por ella.

En otras palabras, el voto duro conservador, se dividirá entre Margarita y el Frente PAN PRD, claro, de lograrse esa alianza con un candidato como Anaya.

En esta ecuación, no me queda claro bien a bien qué sitio ocupa Miguel Ángel Mancera.
¿Acaso, me pregunto, maniobró para debilitar a Ricardo Anaya y lograr ser candidato del Frente PRD PAN. Es posible, aunque sería más lógica la fórmula siguiente:

PRD. Miguel Ángel Mancera
PAN. Ricardo Anaya
Independiente. Margarita Zavala
Morena. López Obrador
PRI. José Antonio Meade
Esperemos.
Yo también soy Pueblo.
Por allí nos encontraremos.