Aplicar la ley simple y llana
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BARATARIA

Aplicar la ley simple y llana

 


Seis hechos de sangre consumados en 24 horas a lo largo y ancho de Oaxaca reciben al abogado, José Bernardo Rodríguez Alamilla, como nuevo titular de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca.

Este miércoles, antes de rendir protesta, luego de ser electo por los 38 diputados locales presentes en el Congreso, ya habían ocurrido tres ejecuciones. Algo terrorífico para alguien que ha dedicado gran parte de su carrera en defensa de los derechos humanos. En mayo de 2019 asumió como ombusdperson, al tomar la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca.

En los últimos dos meses, Oaxaca se ha visto sacudida por una ola violenta que ya preocupa a la ciudadanía, esa ciudadanía que busca diversas formas para protegerse, no así el gobierno que al parecer no cuenta con una estrategia de seguridad pública de estado para hacer frente a la delincuencia.

Crímenes atroces se han cometido a la luz del día en las ocho regiones del estado, pero últimamente en la ciudad de Oaxaca y su mancha conurbada.

La mayoría han sido atribuidos a los cárteles de la droga que castigan sin piedad a dueños de negocios para cobrarles piso o cobran factura a los elementos de bandas locales, que venden estupefacientes.

Otras ejecuciones son atribuidas al cártel de los colombianos que matan a las personas por adeudos de dinero que prestan para luego cobrarles intereses elevados.

Lo cierto es que estos grupos criminales han encontrado campo fértil por la nula acción de las autoridades policiales para enfrentarlos y reducirlos a prisión, que es donde deben estar.

Al momento el marino, capitán de Fragata, Iván García Álvarez, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, no se ha pronunciado al respecto.

Así, Oaxaca ha dejado de ser una entidad tranquila para pasar a engrosar las estadísticas de ciudades con elevadas cifras de homicidios dolosos, asaltos, robos  y feminicidios.

De acuerdo con el reporte acumulado de carpetas de investigación iniciada por unidades administrativas de la Fiscalía General del Estado, del 01 de diciembre al 31 de diciembre de 2022 ocurrieron en Oaxaca un total de 65 homicidios dolosos, en tanto que en ese mismo lapso ocurrieron 13 homicidio dolosos de mujeres

En cuanto a robo a transeúntes ocurrieron 220, mientras que la cifra de robo de vehículos fue de 263.

Aun cuando no hay todavía cifras oficiales, este año los homicidios dolosos van a la alza, pues tan solo en la tercera semana de enero ya se habían reportado 22 homicidios, de acuerdo con cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Y los seis asesinatos ocurridos entre el miércoles y jueves corroboran que Oaxaca tuvo una semana roja, violenta y, hasta el momento, el gobierno no ha emitido algún comunicado para tranquilizar a los oaxaqueños que sienten temor de los actos impunes de la delincuencia.

El miedo es tal que una persona de la tercera edad, entrevistada por el reportero Jesús Santiago, de El Imparcial TV, dijo que en el fraccionamiento Álamos, que se ubica en la agencia de Montoya, los propios habitantes, cansados de tantos robos a casas-habitación y asaltos en la vía pública, se han organizado, y todas las noches realizan rondines, en el sector, para inhibir a la delincuencia.

Otro ciudadano, Alberto Gaytán, comentó que la ciudadanía ya está harta de tantos hechos delictivos, como los crímenes que mantienen a los ciudadanos en la zozobra. “El gobierno debe endurecer las penas para meter en cintura a los delincuentes, pero también debe incrementar las actividades de vigilancia, con una policía bien adiestrada y armada, que sea capaz de enfrentarse a los delincuentes antes que Oaxaca sea un estado esclavo de la delincuencia”, precisó.

Por otro lado, Oaxaca ya tiene nuevo titular de la Fiscalía General del Estado. Esperemos que José Bernardo Rodríguez Alamilla dé los resultados esperados en cuanto a la impartición de justicia; que responda con creces a la confianza que le han brindado los diputados que ven a este servidor público como un elemento capaz para impartir justicia.

Hay muchos crímenes por aclarar, por lo tanto, muchos archivos por desempolvar. Hay mucha gente que demanda justicia, pero también hay que limpiar de la corrupción a esa institución, para muchos, casa del jabonero, porque el que no cae, resbala.

Por lo pronto, los elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones e integrantes del Ministerio Público ya le piden que no se cierre al diálogo como ocurrió con el pasado fiscal, sino que deje la comodidad del escritorio y salga a los distritos para enterarse de viva voz de las necesidades de los que laboran en la Fiscalía como de los ciudadanos que demandan justicia.

Que así sea.