A 66 años, refrenda El Imparcial compromiso con la veracidad y el servicio
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A 66 años, refrenda El Imparcial compromiso con la veracidad y el servicio

El diario es una tribuna abierta, plural y sólida, que ha dado forma a periodistas y voz a los diversos sectores de la sociedad, subraya su director, Benjamín Fernández Pichardo


A 66 años, refrenda El Imparcial compromiso con la veracidad y el servicio | El Imparcial de Oaxaca

Al encabezar la celebración con motivo del 66 aniversario de El Imparcial, el director y gerente general, Benjamín Fernández Pichardo, refrendó el compromiso del diario con los valores éticos, de veracidad y servicio hacia la ciudadanía.

Acompañado por dos de sus hermanas, también integrantes del Consejo de Administración de la empresa periodística con mayor tradición en Oaxaca, Mina y María de los Ángeles Fernández Pichardo, y por don Guillermo Pichardo Domínguez, hijo de uno de los fundadores, don Benjamín afirmó que la empresa editorial llega a un aniversario más, de la mano de sus fieles lectores.

“Hace 66 años, los hermanos Pichardo llegaron a Oaxaca a fundar El Imparcial en la calle de Hidalgo número 14, una aventura que se ha consolidado con el tiempo y gracias al esfuerzos de todos”, enfatizó.

Junto al columnista Felipe Sánchez, el reportero Humberto Torres Ramírez, el director Adjunto, Juan Pérez Audelo, y de la autora de la columna De Tocho Morocho, Montserrat Fernández Galindo, el reconocido periodista ponderó el valor de respetar y trabajar a lo largo de las décadas bajo un estricto código de ética.

“Con el tiempo hemos creado estructuras internas, capacitación constante que ha consolido lo que hoy es El Imparcial; una tribuna abierta, plural y sólida que ha dado forma a periodistas y voz a los diversos sectores de la sociedad”, manifestó.

Celebró el prestigio ganado a pulso por el diario a base de esfuerzo, trabajo y rectitud, con la que se ha actuado en la edición de todos los días, desde hace 66 años, “no pertenecemos a ningún partido político y mucho menos deseamos puestos”.

Dijo que a 66 años de su fundación, los principios éticos que dieron vida al Mejor Diario de Oaxaca, se vuelven más vigentes, ante los malos tiempos y la crisis generalizada que ha impactado a la mayor parte de diarios.

“Ahora es imprescindible un periodismo honesto, que no existe en Oaxaca, porque todos son tribuna de actores políticos, partidos políticos o de ex gobernadores, y el único periódico hecho en serio es El Imparcial”, reiteró.

De esa forma, subrayó que mientras algunos periódicos del país cierran sus puertas, el Imparcial se fortalece, luego de poner en marcha una austeridad en los presupuestos, lo que le ha permitido seguir vigentes.

“Nos hemos fortalecido con el tiempo y tengo que agradecerles a todos por su esfuerzo para que El Imparcial se mantenga en el gusto del lector, con dignidad y que siempre se ha destacado por su institucionalidad y por apoyar a quienes se conducen del lado de la ley”, externó.

Sostuvo que el diario está hecho por periodistas, basado siempre en la verdad, y dio lectura a un editorial elaborada hace unos años, pero que hoy toma vigencia, al abordar temas como honestidad, sacrificio, compromiso, “directrices que deberán seguir las nuevas generaciones”.

A su vez, el director Adjunto de la casa editorial, Juan Pérez Audelo, con una antigüedad de 22 años, recordó algunos temas de interés colectivo sobre corrupción, obras inconclusas, editoriales abordados en las páginas del diario a lo largo de los años.

En su oportunidad, el columnista Felipe Sánchez reconoció el valor periodístico de El Imparcial y la libertad editorial para escribir las columnas, “en 2006 sufrimos una embestida de la Sección 22 por denunciar sus abusos, pero no cedimos al chantaje y con valor el diario defendió al pueblo”.

Humberto Torres Ramírez, periodista y autor de la columna Las Plumas del Tecolote, desde hace 37 años, afirmó que a lo largo de su historia el periódico no solamente ha escrito la historia de Oaxaca, sino también ha sido protagonista. “A lo largo de 66 años se ha escrito un periodismo que ha permitido trascender más allá del estado, al ser un referente y es un orgullo trabajar y pertenecer a la familia de El Imparcial”.

En su intervención, la señora Mina Fernández Pichardo agradeció el trabajo y dedicación de quienes laboran en los diversos departamentos del diario para ofrecer al lector un producto de calidad y con veracidad, al ser el periódico de los oaxaqueños.

María de los Ángeles Fernández Pichardo, presidenta del Consejo de Administración, solicitó al personal presente seguir con el esfuerzo y trabajo diario, con lealtad y coordinación para seguir en el gusto de los lectores.

A nombre del gobernador del estado, Alejandro Murat Hinojosa, el vocero del gobierno estatal, Alfonso Martínez, refrendó el respeto del gobierno hacia el diario El Imparcial, “al ser un orgullo para los oaxaqueños el tener un periódico de esa calidad.

“Reconocemos el esfuerzo que implica mantener un periódico impreso en una era en que es muy complicado mantenerlo, es un orgullo tenerlo y se nota el oficio, y que es una casa (editorial) con mucha tradición, con mucha escuela y que Benjamín (Fernández Pichardo) mantiene un liderazgo no solo a nivel estatal, sino nacional, muy bien ganado y que representa a mucha honra al diario El Imparcial”, cerró.

EL IMPARCIAL, a 66 años sigue vigente

Hablar de EL IMPARCIAL, es hablar de honestidad, rectitud, sacrificio, compromiso. Es hacer remembranza de más de medio siglo de historia; de dar cuenta puntual y sin desvíos del acontecer cotidiano y de la travesía de Oaxaca, desde mediados del siglo XX hasta hoy. Desde hace años no solo aceptó el reto de ser el mejor diario de Oaxaca, y lo puso en su cabezal, como un firme compromiso de ser el mejor. Bajo esa premisa trabajamos todos a diario, como si fuera el primer día, siguiendo las directrices que trazaron los hermanos Pichardo y que retomaron los hermanos Fernández Pichardo, desafío que tendrán que cumplir las nuevas generaciones.

Sin duda alguna, el Quijote es el emblema justo que EL IMPARCIAL necesitaba en esos aciagos días de 1951, cuando vislumbraba la primera luz. Y ahí marcó su línea: combatir a los tiranos, defender a los oprimidos, fustigar a los malos gobiernos. Como un idealista recalcitrante y soñador. En esa línea nos hemos mantenido, sin claudicar frente a las crisis económicas y sociales; a los desafíos que entraña el periodismo independiente, frente al autoritarismo y los enemigos fácticos de nuestro pueblo.

Desde un principio se nos estigmatizó de gobiernistas. Nada más lejos de la realidad, pues EL IMPARCIAL siempre ha estado al lado de los buenos gobiernos. Cuando las asonadas y conflictos sociales y políticos han vulnerado la paz social y el Estado de derecho, nuestro diario no se ha confundido: ha estado al lado de las instituciones, del orden y del gobierno establecido. Somos institucionales no gobiernistas. Siempre estaremos del lado del derecho y la razón. Ni cotos de poder, ni facciones políticas.

Hemos sido a lo largo de 66 años un periódico serio, profesional, comprometido con las causas sociales y el bien de México. EL IMPARCIAL tampoco es partido político, grupo o agencia de colocaciones. No golpea para amacizar, tampoco para denostar. En nuestra filosofía no existe la búsqueda del poder, que pervierte la capacidad de informar con veracidad y oportunidad, condenándola a la manipulación y torciendo la realidad. Por ello, por convicción y principios, EL IMPARCIAL ha sido y será un látigo para fustigar a quienes han medrado del patrimonio público y saqueado las arcas estatales. EL IMPARCIAL no defiende ni solapa a corruptos. Para aquellos que han entrado a la historia oaxaqueña por la puerta trasera, porque exhiben la riqueza mal habida; porque con cinismo y desfachatez presumen lo que han extraído de manera ilícita. Nuestro desprecio; nuestro repudio. ¡Corruptos y vende patrias! ¡Traidores y fariseos! Es un pecado de lesa humanidad robarle a un pueblo con tantas carencias, con tanta pobreza y marginación, como es el oaxaqueño. El pueblo debe señalarlos con índice de fuego, para vergüenza de su familia; para el estigma que llevarán siempre sus hijos.

Ojalá las nuevas generaciones entiendan la mística de trabajo, la filosofía de nuestro Código de Ética y la línea que nos fue trazada por nuestros fundadores, para seguir dándole a los oaxaqueños un buen periodismo, comprometido, veraz, oportuno y con verdadera vocación de servicio.

 


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