Negocia Municipio terreno del nuevo tiradero; sortea obstáculos
Se identificó el “ideal”, sin embargo, aún se requiere de la anuencia de vecinos
A menos de un mes de que venza el plazo para seguir usando el basurero en Zaachila, el municipio de Oaxaca de Juárez trata de sortear los obstáculos para concretar la compra del nuevo terreno en que operará su relleno sanitario. Entre las posibilidades ya se definió la ideal, aunque todavía falta lograr la anuencia de vecinos e incluso de autoridades de la comunidad en que se ubicará.
Ferdinando Rosado Duarte, secretario de Servicios Municipales, confirmó lo señalado por Francisco Martínez Neri, edil capitalino, en la última semana, de que para adquirir el terreno en que operará el relleno sanitario es necesario conseguir el aval de la población de la zona.
Para la compra de este terreno, el presidente ha informado que serán necesarios al menos 10 millones de pesos. También, que las opciones que se revisaban se ubicaban en la zona conurbada del estado, fuera del municipio.
Sin especificar ubicación para evitar conflictos, el secretario de Servicios Municipales dijo que se tiene detectado el terreno idóneo y se mantiene el diálogo. “Ya tenemos la opción que creemos más viable, pero falta generar las condiciones de consenso con todos los actores que implica”, detalló.
La adquisición de vehículos para las rutas de recolección de residuos orgánicos, que se esperaban tener desde agosto, siguen en espera. Rosado Duarte espera que la compra, previa aprobación del comité de adquisiciones del municipio, se concrete en esta quincena. “Estamos integrando los expedientes y llevando a cabo todo lo que la normatividad marca para comprarlo de la manera correcta, transparente”.
De las pruebas de compactación de residuos inorgánicos, que esperaban realizarse en los últimos días de agosto, explicó que se harán en la próxima semana.
El retraso en ellas, ahondó el funcionario municipal, se debió a la falta de una planta de luz y otros insumos necesarios para que la máquina opere en el área de barrido. Solo después de esto se enviarán las pruebas a una empresa cementera con la que se pretende trabajar para el aprovechamiento de tales residuos.
