Guadalupe Peña: la pantalla acabó con la liga emocional
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Guadalupe Peña: la pantalla acabó con la liga emocional

Profesora con 11 años en la docencia, se ha desempeñado en el entorno rural y urbano


Guadalupe Peña: la pantalla acabó con la liga emocional | El Imparcial de Oaxaca
Fotos: Adrián Gaytán / La profesora Guadalupe Peña Jiménez vuelve a su salón de clases después de casi dos años de pandemia

Para Guadalupe Peña Jiménez, volver a encontrarse con sus alumnos luego de casi dos años de pandemia fue “muy bonito” y satisfactorio. En su escuela, las clases presenciales se retomaron paulatinamente desde agosto de 2021 y hasta enero. Aunque algunos menores siguen con clases a distancia, por decisión de sus padres, la mayoría de la escuela primaria Benito Juárez está ya en la modalidad presencial.

Hace 11 años que Guadalupe Peña Jiménez se dedica a la docencia, primero desde una escuela primaria de Textitlán, Sola de Vega, en la región Sierra Sur del estado de Oaxaca. Fueron cuatro años los que la egresada de la Escuela Normal Rural Vanguardia (Tamazulápam del Progreso) laboró en un entorno rural para luego reubicarse en la ciudad de Oaxaca.

Guadalupe es una de las profesoras de la escuela primaria Benito Juárez, en el centro de la capital, en donde ha atendido a infantes de primero y sexto grados. Y en donde también ha tenido que adaptar su profesión a las restricciones de la pandemia.

Si los primeros aprendizajes y enseñanzas los había tenido aprovechando los contextos rural y urbano, ha sido la pandemia uno de los mayores retos en un proceso donde no solo le corresponde enseñar sino aprender.

La pandemia, dice, fue en principio “un tiempo para aprender muchísimo, para readaptarnos a las nuevas estrategias, nuevos métodos, porque no podíamos tener a los niños cerca”. Poco a poco, en el actual ciclo escolar, su trabajo ha recobrado el ritmo, pero bajo una modalidad presencial regida por la no tan nueva normalidad.

En marzo de 2020, la entonces emergencia sanitaria propició el cierre indefinido de las escuelas de todo el país, incluida la Benito Juárez. A más de dos años de este freno a la educación y de varios meses con una actividad adaptada a la nueva normalidad, Peña ha tenido que recobrar la dinámica con sus alumnos.

Quien por varios años estuvo al frente de un salón de niñas y niños de sexto grado, se encontró con un gran reto en 2020, pues debía emplear las tecnologías para una educación a distancia o virtual, solo que con menores de primer grado.

 

Fue en principio un tiempo para aprender muchísimo, para readaptarnos a las nuevas estrategias y nuevos métodos” Guadalupe Peña Jiménez – Profesora de la primaria Benito Juárez

 

Si antes podía tomarle la mano a alguno de los menores que estaba triste o tenía dificultades con sus ejercicios, la pantalla acabó con esta conexión. “Tuvimos que adaptarnos, tuvimos que ir aprendiendo, capacitarnos”, explica Peña, quien tuvo que tomar el control desde el otro lado de la pantalla y al mismo tiempo vivir su maternidad.

Las y los niños de primer grado, que suelen tener entre 6 y 7 años de edad, “no están capacitados para aprender detrás una pantalla”, como sí lo podrían estar aquellos de mayor edad. De ahí que la docente recurriera a estrategias como los juegos y dinámicas, a fin de que así sus alumnos pudieran practicar sus ejercicios de lectura, escritura  y números. “Que a partir de internet ellos pudieran estar contestando y practicando en casa para reforzar lo que estábamos trabajando en clases en línea”.

Guadalupe Peña Jiménez es una de las y los 72 mil 143 docentes de Oaxaca registrados por la Secretaría de Educación Pública (SEP) para el ciclo escolar 2020-2021. En educación primaria, se estima que con poco más de 27 docentes que laboran en 5 mil 545 escuelas (5,365 del sector público y 180 del privado).

Volver a sus salón y mirar a sus alumnos sin una pantalla de por medio ha sido una grata experiencia con la reanudación de las clases presenciales. Aunque las medidas sanitarias rigen esta modalidad, para ella ha sido “muy bonito volverse a encontrar con los alumnos, el volver a tener ese contacto, esa enseñanza a la que estábamos acostumbrados”. Y que “para nada se compara con la enseñanza en línea”, que reconoce tiene sus ventajas.

En la víspera del Día de las maestras y maestros, la profesora y madre de familia espera que su labor incida en las y los menores “que son el futuro de nuestra sociedad y país”. Y es que aunque considera que ser docente es una labor difícil, también se trata de una que se puede ejercer con “muchas ganas”, pues se verá reflejado” en los menores y el aprendizaje de estos.


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