Llama arzobispo de Oaxaca a seguir cuidándose

Tras recomendar a los oaxaqueños a seguir cuidándose y trabajar desde el lugar en que a cada uno le corresponde, el arzobispo de la Arquidiócesis de Antequera Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos, pidió celebrar la festividad de la Ascensión de Jesucristo.

Durante la misa dominical celebrada desde la Capilla del Arzobispado, recordó que durante 40 días, Cristo se encontró con sus apóstoles y les dio numerosas pruebas de que había resucitado. 

A pesar de cualquier circunstancia, pidió que se le permitiera al resucitado estar al lado de cada uno para que nos ayude a levantarnos de las caídas. 

“Si no creemos en su presencia, qué difícil será nuestra vida porque así solos no vamos a poder cargar nuestra cruz, por eso habrá momentos en que se reniegue y hasta se blasfeme”. 

En su mensaje a la comunidad católica, expresó que la alegría, el gozo y la felicidad es la paz que quiere el Señor de las pruebas que se van superando con la gracia divina. “Tú eres dichoso, así habló de ti cuando se encontró con Tomás, a quien le mostró sus manos para que creyera que era él, su maestro”.

Ante las actuales condiciones que existen actualmente, demandó no tener momentos de incredulidad, al asegurar que éstos no hacen ningún bien. 

“Ahora somos sus discípulos y si la cabeza está en el Cielo que es Jesucristo, nosotros somos su cuerpo y estaremos con él”. 

Pidió celebrar la Ascensión del Señor, “alegrémonos y gocemos de su triunfo porque es también nuestra victoria, porque donde está él, vamos a estar nosotros”.

El último de los misterios de la vida de Jesucristo entre los hombres fue su Ascensión al Cielo. Aunque este hecho es motivo de alegría, pues nos da la certeza de que el pago de sacrificio de Jesucristo fue aceptado por Dios Padre como la expiación perfecta por los pecadores, deja entre los hombres una extraña e indescriptible tristeza, producto del amor que sentimos por Jesús.

“La Ascensión es un día de fiesta, un día de alegría y de gran solemnidad, puesto que Cristo culmina la obra del Padre; por otra parte, es el preámbulo para la venida del Espíritu Santo”, puntualizó.