Inconclusa obra del centro de salud en Candelaria Loxicha, Oaxaca
Hace casi una década, la construcción del centro de salud de Candelaria Loxicha, parecía ser la esperanza de miles de habitantes de la región, pero la mala ubicación de la construcción la hizo inviable, ahora la obra está convertida en una costosa bodega
Una obra de salud de más de 7 millones de pesos, ahora se usa como bodega de plástico y otro material, ese uso se le da desde que la autoridad municipal perdió la esperanza de que se convierta en centro de salud con servicios ampliados en beneficio de 10 mil habitantes.
“Fuimos a diversas instancias, vino personal de Protección Civil de la ciudad de Oaxaca y otros especialistas en materia y todos nos dicen que fue mal diseñado porque está a escasos metros de río”, señaló la regidora de Salud de Candelaria, Eva Almaraz Santos.
Con ilusión se colocó la primera piedra en 2009 y a casi 10 años, los poco más de 7 millones invertidos se encuentran deteriorados por el tiempo, cuando esta población carece de lo elemental en todos los sentidos.
Las estructuras abandonadas están siendo acabadas por el polvo, la lluvia, y el deterioro ordinario como ocurre con el edificio en obra negra, que se ubicó a unos 3 metros del cauce del río de Candelaria.
El centro de salud es una necesidad debido a la marginación que padece la población, pero la esperanza de un centro de salud ha quedado lejos.
“Cuando llegan apoyos para las comunidades o se tiene material, ahí se guardan las cosas; hicimos muchas gestiones para que se concluya pero nos dijeron que es improcedente”, comentó la regidora.
Metros abajo de la presidencia municipal está el edificio que sería el centro de salud y cuya proyección fue hecha por el entonces administrador de ese lugar, Alejandro Rasgado y el exgobernador Ulises Ruiz Ortiz, hace una década.
La autoridad municipal en turno que vence en el 2020 quiso recuperarla, que los Servicios de Salud de Oaxaca concluyeran la obra, la equipara y funcionara, pero no será así.
De acuerdo con los datos oficiales, dicha construcción nueva estaba planeada para fungir como un Centro de Salud con Servicios Ampliados (CESSAS) para la atención de la población abierta, que registra un avance físico del 26 por ciento.
Visiblemente, la estructura está dañada por el agua, el deterioro se observa desde metros antes de llegar a los cuartos, los espacios diseñados para la espera de embarazadas, de niños y adultos.
Manchas negras que son muestra del daño del agua pintan este edificio que es conocido como: “el elefante blanco”.
En el 2009, cuando se dio el inicio de la construcción se proyectó para un costo los 28 millones de pesos y de los cuales, avanzaron los SSO en 7 millones 262 mil 574 pesos, hasta el término del sexenio de Ruiz Ortiz.
Le faltaba una inversión por de los 20 millones 200 mil pesos, pero el dinero que ya no llegará para este espacio médico por ser improcedente.
De los 14 espacios considerados como no viales por la federación para su conclusión, donde algunos tienen conflictos por la tenencia de la tierra o en su caso, carecen de las recomendaciones de las instancias de protección civil, se encuentra este.
Los más pobres, sin servicios médicos
La gente que vive en la cabecera municipal tiene más facilidad para acceder a los servicios básicos, entre ellos la de la salud. Quienes habitan rancherías o comunidades más alejadas, padecen y en ocasiones, se aguantan sus dolencias porque no tienen acceso a los servicios médicos.
Este fin de semana, las lluvias incomunicaron a unas dos rancherías de este municipio, que se encuentra entre la Sierra Sur y la Costa de Oaxaca.
La señora Catalina lamentó la situación de pobreza de algunas familias quienes se endeudan al enfermar o piden apoyo de su autoridad municipal.
Contó que, cuando sus nietos o hijos se pusieron mal, los curaban con recetas caseras y eso, no era seguro, a veces las dolencias tardaban en sanar.
“A nosotros los pobres nos duele más la pobreza porque no nos podemos curar”, dijo en espera de que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador cumpla sus promesas de apoyar a los abuelos de la tercera edad.
No obstante, algunas mujeres de la población se mostraron inconformes porque no les ha llegado ningún apoyo y extrañan los beneficios del extinto programa Prospera.
En Candelaria Loxicha, las comunidades un poco más alejadas y donde las familias padecen más la falta de oportunidades son: Peces, Miramar, Santa Rita, Zapote, Tierra Blanca, entre otros.
“Con ambulancia entramos a traer a la gente, pero cuando llueve mucho, no podemos ingresar”, comentó la regidora de salud, Eva Almaraz Santos.
De 3 clínicas localizadas en diversos puntos de la comunidad, el del IMSS-Bienestar es el que da más opciones porque tiene un médico de base, pasante y enfermera, mientras de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) que se localizan en Tepejipana y Orcones, hay faltante de personal.
En una de esas está un médico con su enfermera, pero en el otro solamente la enfermera.
“Las personas viven para pedir apoyo en la compra de sus medicamentos y se los damos”, dijo la integrante de la autoridad municipal.
Cuando la situación es más urgente, los pacientes se trasladan al hospital de Pochutla o a Miahuatlán, según la situación de la emergencia, pero hay lugares sin acceso para las ambulancias.
La comunidad enferma de fiebre, diarreas o accidentes de motociclistas, que son los casos más frecuentes.
Para tener una mejor atención a la población, la autoridad está colaborando con el personal del IMSS Bienestar para lograr la certificación y con ello, lleguen más servicios, buscando certificar la clínica para que cuente con más servicios. La autoridad considera que el servicio de ginecología, obstetricia y pediatría son fundamentales para las comunidades.
320 mdp a la basura
Un recurso por el orden de los 320 millones de pesos se irá a la basura porque 30 obras de salud seguirán abandonadas ya que no entraron en la primera valoración que hizo el gobierno federal para su conclusión, por no ser factibles o porque el presupuesto de 693 millones de pesos es insuficiente para las obras.
En declaraciones pasadas de diversas autoridades estatales, algunas de las obras no fueron diseñadas acorde a las exigencias de una construcción hospitalaria y otras porque enfrentan problemas jurídicos por la propiedad de la tierra.
Un ejemplo del problema es la infraestructura que se localiza en la localidad de Reyes Etla, está el proyecto de hospital en Acatlán de Pérez Figueroa, misma que no había sido retomada y sin fuente de financiamiento.
De acuerdo al desglose del reporte de “unidades médicas suspendidas”, esta obra llevaba un avance del 30 por ciento y cuya primera piedra se colocó en el 2009, por el entonces gobernador Ulises Ruiz Ortiz.
El monto general a invertir en este espacio era de 54 millones 532 mil pesos, de los cuales, se le invirtieron 16 millones y quedaban pendiente más de 38 millones de pesos.
También en San Juan Mixtepec estaba planeado un Centro de Salud con Servicios Ampliados (Cessa), proyectado para la atención de la población abierta y con un costo total de 30 millones 174 mil pesos.
El reporte indica que la obra tiene un avance de 93 por ciento, los trabajos fueron iniciados en el año 2007, con una inversión final de 28 millones de pesos, quedando pendiente 2 millones.
Dentro de la lista de las obras que podrían quedarse suspendidas y con miles de pesos tirados está la estructura valuada en casi 5 millones de pesos en Santiago Huajolotitlán.
En esa comunidad se instalaría un Centro de Salud con Servicios Ampliados (Cessa) que tendría un costo total de 28 millones 890 mil pesos, aproximadamente y que requería de aún 23 millones 900 mil pesos.
En una lista de 30 obras pendientes, también se encuentra lo que sería el Cessa de Santiago Llano Grande, cuyos trabajos iniciaron en el 2008 y presenta un avance del 43 por ciento.
A esa estructura le invirtieron casi 15 millones de pesos, misma que estaba valuada en 35 millones de pesos y quedando pendiente una inversión de 20 millones.
En Santiago Amoltepec, también se prometió un centro de salud con servicios ampliados y que avanzó apenas en un 13 por ciento.
HOSPITALES POR CONCLUIR:
Hospital de Matías Romero Avendaño
San Agustín Loxicha
San Felipe Jalapa de Díaz
Santa María Chilchotla
CESSAS Y CENTROS DE SALUD POR CONCLUIR
Coicoyán de las Flores
Santa Cruz Yagavila, Ixtlán de Juárez
Cheguigo Sur en Juchitán
Santa María del Mar
Magdalena Tequisistlán
San Bartolo, San Juan Bautista Tuxtepec
San José Tenango
San Pablo Villa de Mitla
Sata Lucía del Camino
Santa María Colotepec
San Martín de Porres, Chilchitla
Santa María Guenagati
Santa María Quiegolani
Cerro Gordo, Tonameca
Ensenada, La ventosa, Salina Cruz
Santiago Xiacui
Santiago Yosondua
Santiago Zacatepec
Santo Domingo Ingenio
Tlacotepec Plumas
Zapotitlán del Río
Santa Cruz Loxicha, San Agustín Loxicha
San Lucas Ojitlán
Santa María Colotepec
