Liberan ayuda humanitaria de Nueva York retenida en México

Sara Vela Saavedra, vicepresidenta de la asociación civil Bienestar Familiar Trigo y Miel, informó que a más de un mes del sismo registrado el 19 de septiembre, el pasado martes la Aduana del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), liberó las dos toneladas de víveres que fueron enviadas por migrantes radicados en Long Island, Nueva York.

Explicó que el retraso en la liberación de la ayuda fue porque faltaban tramites que la aduana solicita a todas las organizaciones que reciben cargamentos del extranjero. Luego del conteo de los víveres, dijo que comenzaron a preparar las despensas en Amecameca, Estado de México, para dar paso a la distribución que inició el pasado fin de semana.

“Contamos con una ruta para entregar las despensas de mano en mano. El primer municipio visitado fue Huejotengo, Morelos. Serán 19 las comunidades de Morelos, Puebla y de la Ciudad de México las que visitaremos, son todas las que se encuentran al alrededor del epicentro del terremoto”, citó.

Comentó que luego del siniestro, se dieron a la tarea de acudir a las localidades para verificar las afectaciones. Agregó que en el municipio de Tlamanalco, Estado de México, hay 160 casas destruidas que representan a 500 familias sin hogar.
Mientras que en Puebla hay más 300 familias damnificadas, además de todas las localidades situadas en la zona conocida como Los Volcanes, donde ya hicieron algunas entregas de víveres.

Vela Saavedra reconoció el espíritu humanitario de los migrantes voluntarios de Nueva York que recopilaron y prepararon los insumos durante varias jornadas de trabajo.

“Nos gustaría que la frontera de Estados Unidos se ampliará más tiempo para que la ayuda humanitaria siga llegando. Hay muchos condados que están enviando víveres a otras organizaciones en México”, subrayó.

A pesar de las trabajas y los tramites, consideró que la tarea para recuperar el tejido social en las entidades más afectadas por los sismos del 7 y 19 de septiembre, es aun larga.

“Oaxaca ha sido muy afectado. Hay pueblos que no suenan pero que están careciendo por los dos terremotos que hemos sufrido en un mes”, puntualizó.