Sin noticias de la activista Irma Galindo
Fue vista por última vez el 10 de noviembre cuando estuvo en Ndoyocoyo y después se retiró a Buena Vista Totoy
Felipe Montes, Emanuel Mora, artistas de Tlaxiaco; además de amistades, promotores culturales y ambientalistas emprendieron la búsqueda de la defensora de los bosques, Irma Galindo Barrios, de 36 años, desaparecida hace una semana en una comunidad del municipio de San Esteban Atatlahuca, en la región Mixteca.
A través de las redes sociales dieron a conocer la fotografía de la activista, promotora cultural y de la medicina tradicional, a quien vieron por última vez el 10 de noviembre cuando estuvo en el pueblo de Ndoyocoyo y después se retiró a su vivienda en Buena Vista Totoy.
Atatlahuca está consternado por esta desaparición que se enmarca en momentos tensos entre las comunidades donde la disputa ha sido la tierra entre hermanos del municipio como Mier y Terán, Ndonoyuji y Guerrero Grande.
Inclusive, de este conflicto territorial la casa de la activista fue dañada por un incendio. Sin embargo, nadie se ha acercado a la vivienda de Galindo Barrios por temor de una agresión física o armada; además, no se ha acudido a la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJ) a reportar la desaparición.
La ambientalista ya había denunciado por redes sociales a los talamontes y a las autoridades municipales, y se teme que esta sea la principal línea de investigación por la desaparición de la mujer indígena.
Los gobiernos municipales han guardado silencio desde hace más de una semana sobre este caso de la ambientalista que no ha podido ser localizada, afirman amigos de Irma.
Varias amistades de la activista señalan que ya había sido víctima de amenazas por viajar a Tlaxiaco y denunciar —en varias ocasiones—situaciones de violencia contra la mujer. Asimismo, de señalar lo que está mal en el municipio, principalmente, el asunto de la explotación de los recursos naturales.
Cabe señalar que Irma se ha encargado de ser partícipe de diferentes eventos culturales, además es defensora de la lengua materna en ese municipio y promotora de las tradiciones y culturas de San Esteban Atatlahuca.
Felipe Montes y Emanuel Mora no descartan la posibilidad de una marcha y algo más fuerte que pueda atraer las miradas de los gobiernos para dar con el paradero de la ambientalista. No descartan que sea una de las víctimas de su comunidad por esa lucha territorial por la explotación de los recursos naturales.
