La banda de “Cinco Changos” le pone ritmo al crucero
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

La Capital

La banda de “Cinco Changos” le pone ritmo al crucero

Sin trabajo ante la pandemia, buscan lugares para tocar


La banda de “Cinco Changos” le pone ritmo al crucero | El Imparcial de Oaxaca

Un gracias, una sonrisa, algunas monedas o a veces la invitación a una tocada, todo ha servido para un grupo de músicos que hace casi tres meses hizo del crucero de Cinco Señores su escenario. Bajo el puente elevado, emergen las notas de “Flor de piña”, “Son calenda”, chilenas y sones. 

Es la autodenominada banda de “Cinco changos” (o la “Cinco S”) la que desde las 09 y hasta las 16 horas pone ritmo a uno de los puntos más concurridos de la ciudad. La fiesta se extiende hasta casi el anochecer si es fin de semana o si no les toca la suerte de ir a amenizar una fiesta.

“No te voy a decir que ganamos como acostumbrábamos, pero por la necesidad estamos trabajando”, cuenta uno de ellos.

Ante el estruendo de los motores, las bocinas de conductores desesperados porque el semáforo cambie a verde y el reciente hartazgo por las campañas electorales, seis músicos han tratado de cambiar el ambiente. Han hecho que más de uno mueva el cuerpo fuera o dentro del coche, o que cante el tema si lo conoce. Aquí, la gente los ha recibido bien, a diferencia de otros puntos donde llegaron a amenazarlos con enviarles a la policía.

Tocar, dice “Richard”, es lo que mejor saben hacer, pero lo que desde hace más de un año los tiene en crisis por la pandemia, por el freno a las fiestas y celebraciones o la cancelación de contratos. Como ayudantes de albañil, en la venta de frutas y verduras, herrería y pintura “Pipi”, “Nadir”, “Torito” y Richard han buscado obtener un ingreso para sus familias y estudios. 

Pero desde hace casi tres meses decidieron retomar la música y al ritmo de banda tener “un trabajo honrado”. Al mismo tiempo, “alegrar un poquito esta situación que nos tiene tensos a todos”. 

No siempre se obtienen una moneda. La competencia por la atención es fuerte y la gente se confunde al pensar que los músicos son parte de las brigadas de campaña política. Pero la banda de Cinco Changos es de apenas seis miembros que cada que pueden se separan o piden respeto a los promotores del voto para dos candidatos a la presidencia municipal. 

Los equipos de campaña, dice Richard, se han aprovechado de su música y sin pagar nada por ello. Cuando han preguntado por el costo de su trabajo, agrega, prefieren rechazar la labor, aunque no pierden oportunidad para justificar su presencia en fotos o videos, o aproximándose a ellos para que la gente crea que son parte de la promoción.