Instituto de la Mujer mantiene operaciones: Regidora
Esto luego de que el pasado miércoles Jaquelina Escamilla Villanueva denunciara públicamente que el edil de Oaxaca de Juárez la destituyó de su cargo al frente del instituto.
La operación del Instituto Municipal de la Mujer seguirá en pie, asegura la regidora de Derechos Humanos e Igualdad de Género, Mirna López Torres. Esto luego de que el pasado miércoles Jaquelina Escamilla Villanueva denunciara públicamente que el edil de Oaxaca de Juárez la destituyó de su cargo al frente del instituto.
El instituto, aclaró, ha venido trabajando con otras dinámicas a raíz de la emergencia sanitaria por Covid-19, especialmente por la vía telefónica. Y que seguirá funcionando en tanto es un tema que no puede descuidarse.
“Vamos a vigilar que el personal adscrito siga dando respuesta y acompañamiento a las mujeres. La Casa de Medio Camino tiene una responsable que no puede dejar de dar el servicio”, aseguró la regidora.
Sobre el caso de Jaquelina, quien el miércoles denunció públicamente que fue destituida de su cargo como directora, sólo indicó que como regidora e integrante del cabildo municipal aún no puede emitir un juicio. Aunque aclaró que está en contra de toda violencia en contra de las mujeres. Asimismo, que sobre el caso se tienen que seguir los procesos y cauces legales.
“Respecto a la violencia política e institucional denunciada en cuanto a la destitución del cargo, debe decirse que es necesario apegarse al orden jurídico vigente”, señaló la funcionaria, quien ya había externado ello en su pronunciamiento del jueves. En ese mismo, señala que como integrante del ayuntamiento no puede emitir juicios anticipados, “sin que esto implique omisión o descalificación de la denuncia”.
El miércoles, a través de una transmisión por la página de Facebook del Instituto Municipal de la Mujer, Jaquelina Escamilla denunció públicamente que el presidente Oswaldo García Jarquín la destituyó de su cargo luego de que hubiera problemas con la realización de una conferencia virtual impuesta. Esta separación, dijo, fue a través de una llamada telefónica, en la que el edil le había advertido que si no se transmitía la conferencia en esos momentos que presentara su renuncia.
En la misma denuncia, Escamilla señaló que el edil y su esposa, Patricia Benfield, la habían amenazado luego de que se transmitiera en la página del instituto una ponencia sobre derechos sexuales y reproductivos. El jueves, luego de que se diera a conocer el caso de Escamilla, diversas organizaciones civiles e incluso el Instituto Nacional de las Mujeres se pronunciaron a favor de Escamilla y condenaron la violencia política ejercida hacia ella. También pidieron justicia para la afectada.
