Desplaza ambulantaje a ciudadanos en Oaxaca
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Desplaza ambulantaje a ciudadanos en Oaxaca

Calles del Centro Histórico en poder de vendedores ambulantes; no hay espacio para caminar en aceras del primer cuadro


El comercio informal poco a poco se ha ido apoderando de las calles del primer cuadro de la capital y de las banquetas que se tenían para caminar, ahora solo queda escasamente un metro para desplazarse.

Uno de los problemas más visibles y preocupantes que enfrenta la capital, es el del empleo informal, en especial el fenómeno del comercio ambulante, pues ha ido en aumento de forma imparable.

Tan solo en calles como: Colón, Flores Magón, Las Casas, Bustamante, 20 de Noviembre, Armenta y López, el peatón debe bajarse al arroyo vehicular para poder continuar su marcha, debido a que las estructuras metálicas colocadas por los ambulantes abarcan la mayor parte del espacio.

Sin embargo, pese a las quejas de los ciudadanos y de los comerciantes establecidos en el centro de la ciudad, la autoridad municipal ha hecho oídos sordos a las demandas de ordenamiento y limpieza de calles de comerciantes ambulantes.

Origen incierto; dañan por igual

El origen de los comerciantes irregulares en la ciudad de Oaxaca es variado, pues trabajan en las calles desde originarios de los Valles Centrales como personas que migraron de sus comunidades indígenas o de la Ciudad de México, Estado de México o Puebla.

A pesar de que las autoridades han declarado, no haber otorgado más permisos ni tolerancia a vendedores ambulantes, el número de éstos sigue creciendo principalmente en el centro histórico, expone el investigador Genaro Pérez Ruiz.

Sin duda alguna, el aumento del comercio ambulante ha generado fuertes problemas entre la autoridad, los mismos vendedores, los comerciantes establecidos y la ciudadanía, sostiene en su estudio “el fenómeno del comercio informal en el municipio de Oaxaca de Juárez y su impacto en las micro empresas”.

El ambulantaje es una actividad tan difundida y es bastante representativa respecto a la población que vive y se beneficia de la actividad, al grado que las autoridades ven la ventaja de legalizarla por su carga política y contenido social, no obstante que esto sea desleal con el comercio establecido que paga impuestos, y que implique con ello darles al traste, apunta.

Las respuestas que han dado las autoridades al problema de la economía informal, especialmente en lo que se refiere al comercio ambulante han sido bastante incompletas, ineficaces y erróneas, cuestiona.

Los factores

Con un padrón oculto, el aumento del comercio ambulante en el municipio capitalino, se asocia al crecimiento de la población y al escaso crecimiento de la economía, pues no se generan en el sector formal los empleos que la gente demanda.

Desde la opinión de los liderazgos de comercio establecido, las microempresas se ven seriamente afectadas, sobretodo, aquellas que ofrecen productos similares a los que la economía informal dispone.

Exponen que debido a los gastos de operación como renta, sueldos, seguridad social, en que incurren no pueden competir con los precios que ofrece el comercio ambulante; esto es una competencia sumamente desleal, difícil de competir y contrarrestar.

Tanto para los vendedores ambulantes como para los comerciantes establecidos, las autoridades no frenan esta situación porque en ella ven una jugosa ganancia aunque para el sector del comercio formal, aparte de que causan una mala imagen a la ciudad, son una competencia desleal, pues no pagan impuestos.

Un buen negocio

Las autoridades señalan que los vendedores ambulantes que son retirados, al poco tiempo
reinciden, pues vender en el centro histórico es un buen negocio.

Para muestra el caso de Noemi, joven de 24 años, madre soltera, con estudios de Bachillerato inconcluso; a ella le salió la oportunidad de instalar su puesto ambulante de frutas en la calle de Bustamante a escasas dos cuadras del zócalo.

Sin embargo, a la par de sacar dinero para la compra de la materia prima que utilizara para la venta debe sacar de 50 a 70 pesos diarios como parte de la cuota para los inspectores municipales.

“Pasan por su cuota (los inspectores ) y nos dejan trabajar de 8:00 a 18:00 horas o un poco más, sí es que acompletamos los 100 pesos, pero eso depende de cómo este la venta”, explica la mujer de tez blanca.

Para algunos especialistas en la materia, señalan que la causa de fondo es la carencia de empleos y de oportunidades, aspecto que orilla a muchos oaxaqueños a refugiarse en el ambulantaje como medio para sobrevivir.

Pero, para las organizaciones de comerciantes establecidos, los ambulantes dan una imagen negativa a la ciudad, aunque no debemos olvidar que ello es el reflejo de la pobreza que vive el estado.

En la mayoría de las ciudades de la República Mexicana existe este problema como tal; pero en Oaxaca, por ser uno de los estados con mayor rezago económico, el comercio ambulante ha crecido considerablemente afectando a las microempresas que son entidades debidamente establecidas.

El investigador de la facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) expone que mientras para unos es un factor dañino a la economía pues estimula la evasión de impuestos, la competencia desleal a los negocios formalmente establecidos, corrupción y en ocasiones delincuencia; para otros representa una válvula de escape en la que han encontrado un medio de subsistir ante la carencia de empleos en el sector formal de la economía.

Reconoce que en tiempos de crisis este tipo de economías tienden a incrementarse, pues la escasez de fuentes de empleos obliga a las personas a realizar actividades no reguladas pero que de alguna forma los beneficia para seguir viviendo al paso de los días.

A pesar de que existe un reglamento para el comercio en vía pública, éste no se aplica ni es observable de manera general permitiendo un descontrol y una total libertad para que los comerciantes ejerzan su actividad escudados en sus líderes, explica el estudio.

En Oaxaca, este fenómeno ha adquirido dimensiones particulares, pues además de los daños referidos es fuente de clientelismo político.

Piso parejo para todos

Para la presidenta de la Alianza Empresarial y Comercial de Oaxaca (AECO), Esther Merino Badiola, el comercio formal siempre ha pedido a las autoridades de los diversos órdenes de gobierno, aplique la ley a los ambulantes.

“Queremos piso parejo, dado que el emprendedor que arriesga su capital está en desventaja con el comercio en la vía pública, toda vez que son tomados como sujetos cautivos y no de desarrollo”, comentó.

Consideró que es necesario pasar de las buenas intenciones a los hechos y corregir lo que se tenga que hacer en las calles del centro de la capital, pues estas parecieran ser del ambulantaje.

“Hoy vivimos una economía disminuida, eso nos preocupa como Iniciativa Privada, como comerciantes que pagamos impuestos y competimos con vendedores informales es momento de actuar por parte de los gobiernos”, cerró.


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