Escuelas del Istmo aún no están listas para el retorno a clases
Todos los planteles educativos del Istmo se mantuvieron cerrados este lunes, pese al anuncio del IEEPO de reanudar labores
A pesar que el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) informara que este lunes reiniciaban las clases en todas las escuelas del estado que no sufrieron daños, incluyendo en las regiones del Istmo y la Mixteca, zonas afectadas por los sismos del 7 y 23 de septiembre, en el Istmo continuaron suspendidas las labores educativas.
La mayoría de las escuelas aún no están listas para el retorno a las aulas y en muchos de los casos aún no se cuenta con el aval de los padres de familia y maestros.
En Unión Hidalgo comenzó la demolición de la Escuela Secundaria Técnica 33 y en La Ventosa, agencia de Juchitán, autoridades locales y directivos del la escuela primaria Ignacio Allende, cuyas instalaciones también alberga el turno matutino de la escuela Lázaro Cárdenas, comenzaron a demoler la barda perimetral porque representaba un peligro. Asimismo la mayoría de las aulas presentan grietas y aún no se cuenta con un dictamen de Protección Civil para su posible demolición.
De acuerdo con Jorge Oropeza, vocero del IEEPO informó que en la mayoría de las escuelas, maestros y padres de familia se reunieron este lunes para fijar fechas para el reinicio de clases, y muchas aún esperan a que se les entregue físicamente el dictamen de Protección Civil o un Director Responsables de Obra (DRO), avalado por las autoridades, que manifieste que no hay riegos para los niños.
En Juchitán, municipio más afectado por el sismo del 7 de septiembre, todas las escuelas estuvieron cerradas. En algunas se trabaja aún en la demolición de bardas y estructuras que pudieran representar un riesgo para los niños.
En este municipio están casi listas las 36 aulas provisionales del Centro Escolar Juchitán, plantel que fue derruido al sufrir daños totales en su estructura.
Jorge Oropeza indicó que para noviembre se tendrá que reanudar las clases en todo el estado ya sea en sedes alternas o en aulas construidas de manera emergente para que los niños ya no sigan perdiendo más tiempo en el ciclo escolar.
