¿Estamos ante una nueva crisis de salud en África por la viruela símica?
¿Qué se sabe del nuevo brote? ¿Cuáles son sus síntomas y cómo se transmite? La OMS y los gobiernos africanos enfrentan una carrera
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha vuelto a encender las alarmas al declarar por segunda vez la emergencia global por los brotes de Mpox, popularmente conocida como la viruela del mono, en la República Democrática del Congo (RDC) y otras regiones de África. Con más de 14 mil casos confirmados y 524 muertes, el resurgimiento de esta enfermedad ha generado una creciente preocupación a nivel mundial. Especialmente por la aparición de una nueva variante del virus que se está propagando rápidamente.
UN PANORAMA ALARMANTE EN ÁFRICA
El brote actual es particularmente preocupante debido a la limitada disponibilidad de vacunas en el continente africano. Donde la enfermedad ha cobrado la mayoría de sus víctimas. Según la OMS, más del 96% de los casos y muertes se han registrado en la RDC, y la situación se ha agravado con la aparición de una nueva forma del virus (Clade Ib) que es más contagiosa y difícil de detectar. Este subtipo del virus ha comenzado a causar estragos en niños menores de 15 años. Que ahora representan más del 70% de los casos y el 85% de las muertes en el Congo.
EL DESAFÍO DE CONTROLAR LA PROPAGACIÓN
A pesar de que existen vacunas como Jynneos y LC16, su acceso en África ha sido extremadamente limitado. Mientras que en otros brotes anteriores la vacunación y los tratamientos ayudaron a controlar la expansión del virus, en África la situación es diferente. La falta de recursos y la lenta respuesta internacional han dejado a millones de personas en una situación vulnerable.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha subrayado la urgencia de la situación, indicando que “la posibilidad de una mayor propagación dentro y fuera de África es muy preocupante”.
La nueva declaración de emergencia tiene como objetivo movilizar recursos internacionales y aumentar la atención sobre la gravedad del brote en África.
UNA ENFERMEDAD ENDÉMICA QUE SE HA VUELTO GLOBAL
La viruela del mono no es una enfermedad nueva. Ya que fue identificada por primera vez en humanos en 1970 en la RDC. Sin embargo, el reciente aumento en los casos y la aparición de nuevas variantes más peligrosas han hecho que la OMS vuelva a clasificar el brote como una emergencia sanitaria global. Este resurgimiento no solo amenaza a África, sino que también plantea un riesgo para otras regiones del mundo si no se toman medidas adecuadas.
¿ESTAMOS ANTE UNA NUEVA PANDEMIA?
Si bien la declaratoria de emergencia global por parte de la OMS no equivale automáticamente a una pandemia, sí indica un nivel de alerta máximo que busca movilizar recursos y atención para frenar la propagación de la enfermedad. Sin embargo, los desafíos son enormes, incluyendo la limitada disponibilidad de vacunas. Así como la falta de financiación y la presencia de brotes de otras enfermedades que compiten por los mismos recursos.
El director de los CDC de África, el Dr. Jean Kaseya, ha hecho un llamado urgente a la comunidad internacional para que preste atención a la creciente epidemia en África. La cual, hasta ahora, ha sido “en gran medida ignorada”. La falta de una respuesta rápida y efectiva podría llevar a un aumento en la propagación global del virus, con consecuencias devastadoras.
EL CAMINO HACIA ADELANTE
La OMS y los gobiernos africanos enfrentan una carrera contra el tiempo para contener el brote antes de que se propague aún más. Las lecciones aprendidas del brote global de Mpox en 2022, cuando se controló principalmente en países ricos mediante vacunas y cambios en el comportamiento de riesgo, deben aplicarse de manera urgente en África para evitar una crisis sanitaria de mayor magnitud.
La situación sigue siendo crítica y requiere una respuesta coordinada y efectiva por parte de la comunidad internacional para evitar que esta emergencia global se convierta en la próxima gran pandemia.