El escritorio de María Hortensia: Belén
“Etimológicamente la palabra Belén significa casa de pan…”
APRECIABLES LECTORES: Es un gozo y alegría contemplar un nuevo día, poder agradecer al Todopoderoso que nos permita disfrutar la Navidad del 2022. Deseo muy sinceramente y de todo corazón la disfruten al máximo rodeados de sus seres más queridos.
“BELÉN”
Etimológicamente la palabra Belén significa casa de pan, y tiene mucha lógica si pensamos que aquí fue el lugar en el que por mandato del César, José y María tuvieron que viajar para empadronarse. Todo, por supuesto, fue parte del plan salvífico de Dios, pues sabíamos que ahí nacería el hijo de Dios, la promesa para nuestra redención, anticipando que se nos daría en cuerpo y alma como alimento, que sería nuestro pan de vida, vida abundante y eterna, y es aquí donde cobra sentido la palabra pan.
En algunos lugares del mundo llaman ” Belén” a la representación en miniatura que preparamos en nuestros hogares, lugares de trabajo, jardines, etc., para representar el nacimiento de Jesús, nuestro salvador. En otros lugares se les llama “Nacimiento”. Hay variedad en la manera en que cada uno lo colocamos, pero si bien son diferentes sus tamaños, materiales, formas y colores, hay una singular y común característica: todos buscan anunciar, gritar, informar con júbilo este acontecimiento.
El hijo de Dios, viniendo a este mundo, encuentra sitio donde los animales van a comer. El heno se convierte en el primer lecho para aquel que se revelará como ” el pan bajado del cielo”, y el colocarlo y darle un lugar especial en nuestro hogar es decirle: Señor, te ofrezco mi hogar para que sea tu lecho este año, te ofrezco a mi familia para que habites en su corazón, tómanos por lecho Señor.
El lugar que le damos no es solo simbólico, es abrirle la puerta al Señor, es marcar mi casa con la señal de que lo espero, de que lo quiero recibir. La contemplación de la escena de la Navidad nos invita a ponernos espiritualmente en camino, atraídos por la humildad de aquel que se ha hecho hombre tan solo para encontrar de frente y personalmente a cada uno de nosotros.
El Nacimiento forma parte del dulce y exigente proceso de transmisión de la fe, no solamente como un adorno. comenzando desde la infancia y luego en cada etapa de la vida, nos educa a contemplar a Jesús, a sentir el amor de Dios por nosotros, a sentir y creer que Dios está con nosotros y que nosotros estamos con él.
Seamos ese Belén que espera y reciba y compartamos nuestro gozo y alegría para contagiar la Paz que nos da su venida. “FELIZ NAVIDAD”. Licenciada María Hortensia Lira Vásquez. Celular 951 21 14 138.
