¡La Felicidad! ¿Un ideal inalcanzable o un estado de equilibrio duradero?
Aunque medirla puede ser complicado y generar expectativas poco realistas, expertos sugieren que construir hábitos saludables
La búsqueda de la felicidad ha sido un tema central en la vida humana, pero ¿es esta una meta alcanzable o un concepto inalcanzable? A menudo confundida con emociones pasajeras como la alegría o la euforia, la felicidad es, en realidad, un estado emocional profundo y estable que trasciende los altibajos cotidianos.
MÁS ALLÁ DE LAS EMOCIONES FUGACES
A diferencia de las emociones efímeras, como la euforia momentánea, la felicidad se define como una condición emocional más duradera y equilibrada. Este estado no depende de factores externos inmediatos, sino de una estabilidad interna que permite a las personas enfrentar la vida con una actitud positiva y resiliente. Para comprender y evaluar la felicidad, se han desarrollado diversos métodos, como test y cuestionarios, que intentan medir el nivel de bienestar. Sin embargo, estos instrumentos pueden tener limitaciones y no siempre aportan beneficios tangibles a quienes los utilizan.
EL RIESGO DE LA SOBREVALORACIÓN
La medición de la felicidad puede ayudar a identificar áreas de mejora, pero también puede generar expectativas que, si no se cumplen, podrían afectar negativamente el bienestar. El psicólogo Sebastián Ibarzábal, miembro de la Asociación Argentina de Psiquiatras, explica que medir la felicidad es complicado debido a la percepción subjetiva y la variabilidad de lo que cada persona considera como felicidad. “Hay personas que suelen decir que quieren ser felices, pero en realidad, no tienen claro qué es lo que quieren hacer y qué significa para ellas eso”, señala Ibarzábal. La dificultad radica en articular la felicidad con la percepción subjetiva y en establecer objetivos concretos que permitan alcanzar un equilibrio emocional.
ENFOQUES ACADÉMICOS: DEFINIENDO LA FELICIDAD
Manuel González Oscoy, profesor de la Facultad de Psicología de la UNAM, sostiene que la felicidad es un estado que, aunque efímero, tiene la capacidad de mejorar nuestras vidas. Según el experto, este sentimiento surge a menudo al compararnos con nuestros semejantes y se transforma en un estado de bienestar cuando persiste. Por su parte, Hugo Sánchez, académico de la misma facultad, define la felicidad como la sensación de esperanza en un futuro favorable, y destaca la importancia de experimentar una gama completa de emociones para una adaptación adecuada al entorno.
ESTRATEGIAS PARA AUMENTAR LA FELICIDAD
Arthur C. Brooks, profesor en la Universidad de Harvard, propone que la felicidad no debe ser vista como un destino final, sino como una construcción diaria. En colaboración con Oprah Winfrey, Brooks sugiere abandonar la idea de una meta definitiva y en su lugar, centrarse en esfuerzos continuos para “ser más felices”. Entre sus recomendaciones están: no fumar, mantener un peso saludable, priorizar el movimiento diario, entrenar estrategias para enfrentar problemas, desafiar al cerebro con nuevos aprendizajes y cultivar relaciones estables. Estas estrategias buscan construir hábitos saludables sostenibles que contribuyan al bienestar general.
RANKINGS Y TENDENCIAS GLOBALES
El Reporte Mundial de la Felicidad 2024, elaborado por Gallup, la Universidad de Oxford y la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, clasifica a Finlandia como el país más feliz por séptimo año consecutivo. El informe se basa en variables clave como la esperanza de vida saludable, la libertad para tomar decisiones, la generosidad y la falta de corrupción. En América Latina, aunque ninguna nación figura en los primeros puestos, Argentina subió del lugar 52 al 48 en 2023.
FELICIDAD Y CULTURA: PERSPECTIVAS DIVERSAS
La felicidad no es un concepto universalmente aplicable y puede variar significativamente entre culturas. Boris Marañón Pimentel, investigador de la UNAM, argumenta que cualquier medición de la felicidad debería considerar aspectos subjetivos y materiales, así como la cooperación entre humanos. Por su parte, el psiquiatra Federico Beines destaca que la felicidad está relacionada con vivir en el presente y que la estandarización de la felicidad puede ser problemática, ya que es medible pero no estandarizable.
SITUACIÓN EN ARGENTINA: UN DECLIVE EN EL BIENESTAR
El “Informe de la Felicidad en Argentina 2024” revela una disminución en los niveles de bienestar en el país. A través de encuestas realizadas a ciudadanos de entre 18 y 65 años, el informe muestra una evolución negativa en la percepción de la felicidad y el bienestar en los últimos años. Este declive refleja los desafíos actuales en la búsqueda del bienestar en la región.
En resumen, la felicidad es un estado emocional complejo que va más allá de las emociones pasajeras y requiere un equilibrio interno y objetivos concretos. A pesar de las dificultades en su medición y la variabilidad cultural, la búsqueda de la felicidad sigue siendo una parte fundamental de la experiencia humana.