Los mayas de la Costa Oriental, integrados a corrientes migratorias
El puerto de Oxtankah, podría considerarse la joya de la corona de la migración en esta región costera.
Los asentamientos mayas de la Costa Oriental de la península de Yucatán, durante los periodos Clásico (300-800 d.C.) y Posclásico (1200-1541 d.C.), estaban integrados a redes de migración, lo que permitía intercambios poblacionales, culturales y político-económicos con otras localidades del norte de la península del Golfo de México, así como de Guatemala, Honduras y Belice; en este panorama de movilidad demográfica, el puerto de Oxtankah, podría considerarse la joya de la corona de la migración en esta región costera.
Esto lo afirmó el profesor investigador del Centro INAH Quintana Roo, Allan Ortega Muñoz, al participar en el conversatorio “La migración en Quintana Roo, desde Naia hasta la actualidad”, en la 35 Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia, con la ponencia La migración en la Costa Oriental de la península de Yucatán en los periodos Clásico, Posclásico y Posclásico Tardío (600-1540 d.C.).
Oxtankah, ubicado al sur de Quintana Roo, a unos 15 kilómetros de la capital, Chetumal, fue uno de los puertos marítimos más antiguos e importantes de la región, tuvo su auge en el periodo Clásico, entre 600 y 900 de nuestra era; en el Posclásico la gente aún acudía a hacer ofrendas y, cuando llegaron los españoles, ahí construyeron una capilla donde hacían misas.
Egresado de la carrera Antropología Física de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, con estudios de posgrado en demografía y estudios de población en El Colegio de México, ha realizado investigaciones con enfoque interdisciplinario, a partir de más de 300 esqueletos de cinco zonas arqueológicas de Quintana Roo: El Meco, El Rey, San Miguelito, Tulum y Oxtankah, que conforman una de las colecciones osteológicas mejor representadas en cuanto al número de individuos, de ambos sexos y de casi todas las edades.
A partir del estudio de isótopos estables de estroncio y oxígeno en piezas dentales y la modificación craneana intencional, ha logrado conocer patrones de movilidad demográfica a lo largo de la Costa Oriental del Petén guatemalteco y de otras ciudades del Golfo de México, comparando sus elementos químicos con datos de estudios publicados sobre 87 esqueletos acerca de las proporciones de estroncio, visto a través de sus dietas y características craneales, realizados en zonas arqueológicas de Teotihuacan, Palenque, Monte Albán, Toniná, El Mirador, Copán y Kaminaljuyu, entre otros.
Estas interrelaciones se confirman con la influencia cultural, a través de la arquitectura de la Costa Oriental, que expresan influencia del estilo mexica, en el Altiplano Central, en el periodo Posclásico.