Las dos mil piezas arqueológicas que fueron entregadas por una familia radicada en Barcelona, España, llegaron a territorio mexicano, dio a conocer el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, este jueves 21 de julio.
A través de su cuenta de Twitter, el canciller informó que tras salir del Gabinete de Seguridad en Palacio Nacional, se encontró con el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto, quien le notificó sobre el arribo de los bienes arqueológicos.
“Con el director del INAH, Diego Prieto, saliendo de Gabinete de Seguridad. Hoy nos informó que ya están en México las dos mil piezas arqueológicas recuperadas por mediación de nuestro consulado en Barcelona”
A principios de julio, la Secretaría de Cultura dio a conocer que el Gobierno de México, a través de su Consulado en Barcelona, recibiría en restitución cerca de dos mil bienes arqueológicos, bajo la decisión voluntaria de una familia de esa ciudad.
Si bien la familia decidió permanecer el anonimato, la dependencia a cargo de Alejandra Frausto agradeció el gesto, toda vez que las piezas forman parte del testimonio, identidad y memoria de los pueblos originarios en México.
De acuerdo con el informe del 7 de julio, las piezas se encontraban en proceso de embalaje en el Consulado mexicano en Barcelona, el cual era supervisado por personal del INAH y la SRE, como parte de la estrategia para combatir el tráfico ilícito de vestigios arqueológicos que se encuentran ilegalmente en el extranjero.
Hasta el momento el INAH no ha detallado el origen de estas piezas, a qué civilización prehispánica pertenecían, la antigüedad, el uso o la connotación religiosa que tienen. Sin embargo, en las imágenes compartidas por la Secretaría de Cultura se aprecia que se trata de diversos artefactos.
Entre los bienes arqueológicas se encuentran vasijas, platos, copas, recipientes, instrumentos y figuras de rostros talladas a mano. Algunas de las piezas se encuentran completas, mientras que otras están rotas o deterioradas.
Estas acciones forman parte de la campaña #MiPatrimonioNoSeVende, mediante la cual se busca visibilizar la comercialización en el extranjero del patrimonio cultural de México, ya sea a través de subastas, coleccionistas o del tráfico ilegal de dichos bienes.
La doctora Beatriz Gutiérrez Müller se sumó a esta iniciativa a mediados de junio, luego de que expusiera en redes sociales que nueve piezas arqueológicas serían subastadas el 15 de dicho mes en Texas, Estados Unidos, además de la programación de una subasta aún mayor para el 9 de julio, donde se ofertarían cerca de 30 bienes más.
La esposa del presidente Andrés Manuel López Obrador comentó que entre los vestigios destacaban esculturas, pendientes y vasijas que pertenecieron a la civilización olmeca, maya y teotihuacana. El valor monetario de unas esculturas femeninas olmecas iban desde los 180 mil pesos hasta el millón de pesos, aproximadamente.
Asimismo, cabe recordar que a principios de julio Italia devolvió a México cerca de 30 piezas prehispánicas que habían sido decomisadas, entra las que se encontraban bienes de las culturas totonaca, zapoteca, mixteca y maya.
De acuerdo con la subsecretaria de Desarrollo Cultural, Marina Núñez, en los primeros tres años de gobierno de AMLO se recuperaron 5 mil 744 piezas arqueológicas del extranjero, provenientes de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Dinamarca, Italia, Australia y Países Bajos.
Por su parte, México ha devuelto vestigios arqueológicos a Perú, Bolivia, España y Nigeria. Mediante la recuperación de estos bienes, se procede a su estudio, conservación y difusión sobre su identidad y representación en las culturas prehispánicas.
