Viajeros hacen escala en espacio Panoplia

Con el perro xoloitzcuintle y la muerte como ejes, Espacio Panoplia expone Viajeros, una muestra abierta en los últimos días de octubre y en curso hasta finales de noviembre. La exposición es una colaboración con Caseta Adoratorio (ubicada en el Mercado 20 de Noviembre), así como con más de una treintena de artistas.

Esta exposición se integra de dos series, una es la de la carpeta gráfica que da nombre a la misma; la otra, un tzompantli con gráficas para las que se invitó a artistas que crearon piezas de 14 por 14 centímetros, con el tema de la muerte.

En el primer caso, hay 12 piezas de un mismo formato, pero de autores varios; la mayoría oaxaqueños y una de Guanajuato. La temática de las piezas retoma la importancia del perro xoloitzuintle, una especie mexicana en la que se cree que es un tipo de mediador o guía de los muertos en el otro mundo.

“No está de más recordar los mitos asociados a este dios-héroe. En los antiguos recuentos orales que registra fray Andrés de Olmos, Xólotl es el elegido para baja al reino de Mictlantecuhtli, señor de los muertos y regresar con huesos y cenizas para que con ellos los mil y seiscientos dioses pudiesen crear a la primera niña y al primer niño”, señala Rafael Arnáiz en el texto que acompaña a la carpeta.

Junto a estas piezas está también un tzompantli (un altar que acostumbraban realizar culturas prehispánicas a partir de cráneos y estacas). En este colaboran 24 artistas, quienes por invitación del taller-galería elaboraron placas bajo la temática de cráneos. El taller se encargó de las impresiones que se observan en dos piezas distintas.

“La intención fue hacer un intercambio de obra, en el que cada autor tuviera sus copias del tzompantli”, explica Mayra Cruz, integrante de Espacio Panoplia, un taller-galería que surgió en Teotitlán del Valle, pero que hace unos meses se instaló en el centro de la ciudad de Oaxaca.